La memoria de gestión del Departamento Xàtiva-Ontinyent que ayer se presentó en el Consejo de Salud comarcal celebrado en la capital de la Costera constata en cifras una realidad que los usuarios han sufrido en sus carnes los últimos meses y que se ha traducido en numerosas quejas. Los tiempos medios de espera se han incrementado de manera notable en lo que va de año, tanto en el campo de las operaciones que implican cirugía como „especialmente„ en el de las pruebas diagnósticas y terapéuticas. Según la estadística oficial que maneja la conselleria, la lista de espera quirúrgica se ha disparado un 40% en el hospital de Ontinyent „de los 47 días de media en 2014 a los 66„ y un 25% en el Lluís Alcanyís de Xàtiva, donde la demora registrada alcanzaba los 95 días „19 más que hace un año„ a fecha de octubre de 2015. El dato sitúa a este hospital por encima de la media autonómica, donde la espera quirúrgica es de 81 días. En la C. Valenciana, el incremento registrado en este ámbito no ha pasado del 23%.
En Xàtiva, los tiempos han aumentado un 90% para cirugía de otorrinolaringología (de 29 a 55 días), un 83% en ginecología (de 41 a 75 días), un 72% en urología (de 43 a 74 días), un 76% en oftalmología (de 33 a 58 días)y un 6% en cirugía general (de 75 a 87 días). Pero son las operaciones de cirugía ortopédica y traumatología las que están registrando mayores problemas: los pacientes de este ámbito han de esperar de media 126 días, 36 más que en 2014.
En Ontinyent, el tiempo de espera ha aumentado un 39% para una operación de cirugía general „de 33 a 46 días„, un 65% en cirugía ortopédica „de 58 a 96 días„ y un 65% en ginecología „de 43 a 71 días„. La única especialidad en la que ha disminuido la demora quirúrgica es en oftalmología, de 39 a 30 días.
El gerente del Departamento, Sergio García, asumió ayer que los datos „que no recogen todo el año y se ven ligeramente distorsionados por la reducción de la actividad sanitaria que se registra en verano„«no son buenos». Para explicarlos, subrayó que en los últimos dos años ha aumentado la complejidad de las cirugías, con mucha más carga de trabajo en áreas como el cáncer de páncreas o las operaciones de mama. La memoria recoge la necesidad de impulsar diversas acciones para mejorar los tiempos de espera, reduciendo porcentaje de pacientes que no se presentan a las operaciones, mejorando la coordinación con la atención primaria, potenciando los autoconciertos o derivando casos concretos a hospitales públicos especializados en determinado tipo de operaciones.
El tiempo medio de espera para consultas externas se ha reducido un 45% en el hospital de Ontinyent „de 82 días a 42„ pero ha crecido un 39% tanto en el Lluís Alcanyís como en el Centro de Especialidades del Espanyoleto „de 37 días en 2014 a 51 en octubre de 2015„. Es en el ámbito de las técnicas diagnósticas y terapéuticas donde se producen los mayores incrementos contabilizados en la memoria de gestión. El tiempo de demora ha pasado de 78 a 108 días para una ecocardiografía, de 82 a 180 para un electomiograma, de 85 a 100 para una colonoscopia y de 55 a 142 días para una gastroscopia, explicaron ayer.
Más espera para el especialista
Tanto para una prueba respiratoria „44 días„como para una ecografía general „33 días„ el paciente ha de esperar más del doble que hace un año. Para un TAC, la demora media es de 54 días, 24 más que en 2014. Pese a las cifras oficiales, algunos pacientes se han quejado de que aguardan hasta 5 meses para ser llamados a consulta. Solo en el campo de las resonancias se ha reducido la espera, de 25 a 17 días. El gerente atribuyó los datos a los problemas que está teniendo el departamento para cubrir diversas jubilaciones de especialistas en áreas como neurofisiología o urología, que se suman al hecho de que diversos profesionales se han marchado al nuevo hospital de Llíria, dejando plazas descubiertas, así como al «impás» tras las elecciones del 24M.
Desde la Confederación de Vecinos constataron ayer el incremento preocupante de las quejas de usuarios y lamentaron «la ausencia de respuesta de la administración», exigiendo «más eficiencia» al SAIP para dar soluciones.
