Representantes de las asociaciones vecinales, culturales, hosteleras y de comerciantes y de los colegios del casco antiguo. Miembros del colectivo de jubilados y pensionistas, de la Junta Local Fallera, de la Hermandad de Cofradías y de todos los partidos políticos de Xàtiva. Expertos y especialistas en patrimonio y arquitectura y hasta el abad de la Colegiata. Nadie sobraba ayer en la Casa de la Cultura. La jornada de participación organizada por el ayuntamiento para debatir y perfilar la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible Integrada (DUSI) con la que Xàtiva competirá en enero con otras ciudades valencianas por una subvención de hasta 5 millones de euros procedente de los fondos europeos Feder reunió a más de una treintena de asistentes, que se repartieron en cuatro mesas redondas para aportar sus ideas en torno a una premisa clara: cómo ha de ser el casco antiguo de Xàtiva de aquí a 2025.
Con este horizonte, el plan global de actuación gestado por el consistorio, con el asesoramiento de la empresa especializada Alias Group, pone el foco en la urbanización, rehabilitación y promoción del patrimonio, el comercio y el turismo en el centro histórico, donde se proyecta un nuevo paradigma que lo convierta en referente internacional y permita una mayor atracción de visitantes, a tiempo que se incrementan sus usos residenciales y comerciales.
Un primer diagnóstico ha permitido evaluar a grandes rasgos las debilidades, amenazas, oportunidades y fortalezas de la ciudad en base a las cuales se diseña una hoja de ruta con una serie de intervenciones pertinentes a corto, medio y largo para alcanzar los objetivos previstos. Entre las líneas de trabajo prioritarias figuran la pacificación del tránsito y la mejora de la movilidad urbana tanto para los residentes como para los turistas, la rehabilitación de las plazas del Mercat y Calixte III o la valorización del patrimonio, la cultura y la tradición con la mirada puesta en el desarrollo de una industria turística local potente.
Un nuevo perfil de residente
El proyecto también contempla la creación de nuevos espacios en solares en desuso para el desarrollo de zonas verdes, aparcamientos o iniciativas comerciales y ligadas a la «nueva economía» y busca un nuevo perfil de residente del casco antiguo, incentivando la recuperación de inmuebles. Entre las propuestas a medio plazo destaca la recuperación del edificio de los sindicatos, ubicado junto al Mercat y propiedad del Ministerio.
