El presidente del Club Deportivo Olímpic, Kike Alcázar, finalizada la primera vuelta del campeonato, y en su primer año al frente de la entidad, ha asegurado que la situación económica «es buena y está dentro de lo previsto». «Espero cumplir con lo anunciado y cerrar el ejercicio —ha anunciado el mandatario— con las cuantas equilibradas». Y ha añadido que se está trabajando «en un proyecto de cuatro años» que ha calificado de «sostenible».
Aunque ha reconocido un retraso «de días» en el pago de nóminas, el presidente ha transmitido un mensaje de «total tranquilidad dado que en unos días quedará todo normalizado. Los jugadores son conocedores de la situación», asegura Alcázar. La victoria ante el Barcelona B en la última jornada hace que también «estemos pasando una buena semana en lo deportivo, pero la sensación es efímera porque tenemos un nuevo partido del domingo», resume el técnico. El equipo ha acabado la primera vuelta con 21 puntos, en puesto de promoción de descenso aunque fuera del descenso directo de categoría.
Nueva salida: a Badalona
El entrenador, Guillermo Fernández Romo, ha manifestado que, como balance al llegar al ecuador de la liga, «tenemos que ser autocríticos y saber que no nos vale con lo que hemos hecho, 21 puntos en 19 partidos. Es verdad que tenemos que hacer las cosas mucho mejor en cuanto a puntos que en la primera vuelta, y ese va a ser el trabajo de todos». El domingo, a las 12 horas, el equipo jugará, de nuevo como visitante, ante el Badalona con las bajas por lesión de Zarzo, Sipo, Polaco y Diego Jiménez; de Samu, por acumulación; y con las dudas por diferentes molestias de Álex Vaquero y Berna.
