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El Llosa retoma la liga con el Atzeneta tras cerrar un 2015 «de menos a más»

Los de Carlos Romeu tienen ganas de dedicar muy pronto una victoria al gravemente lesionado Iván

2015 ha sido un año pleno de obstáculos para el CD Llosa. Obstáculos que ha ido superando, no sin esfuerzo, gracias a la unión existente en los diferentes estamentos de la entidad, desde la directiva a los jugadores. Durante todo este año, Carlos Romeu ha sido el técnico del equipo. Tras conseguir la permanencia la temporada pasada, el objetivo sigue siendo el mismo para el presente curso. Y el camino recorrido, prácticamente no ha variado.

El Llosa empezaba 2015 con 19 puntos y situado en la decimotercera plaza, y cierra la anualidad con 19 puntos y en idéntica posición, con un partido menos, eso sí. Los números para seguir en preferente salen, pero no cabe dormirse en los laureles. Ese es el principal caballo de batalla con el que debe lidiar Romeu. El Llosa da muestras de ser un equipo competitivo, con potencial para no sufrir tanto, pero que adolece de experiencia para llevar los partidos a su terreno. Sin ir más lejos, en el actual campeonato es el equipo que más encuentros ha empatado (7), algo que le penaliza por su bajo número de victorias (4). De haber convertido tan solo un par de empates en triunfos, la posición de los blanquillos sería mucho más desahogada.

El Llosa no ha sido capaz en todo el año de hilvanar más de dos semanas ganando. Es la asignatura pendiente que quiere aprobar en el nuevo curso el conjunto de El Sequiol. Y en una liga que parece mucho más abierta que la de la temporada pasada, el equipo que suma de tres en tres se va enseguida para arriba. Esa sería la mejor forma de hacer buenos los numerosos empates acumulados. Solo cinco rivales han sido capaces de derrotar al Llosa y, curiosamente, han sido mayoría los de la zona baja (Oliva, Sueca y Canalense). Del grupo cabecero, únicamente Portuarios y Contestano se han impuesto a los hombres de Romeu. En cualquier caso, el horizonte se ve despejado. Las sensaciones dejadas por el Llosa en su despedida de año ante el At. Alginet (5-1), invitan al optimismo. Desgraciadamente, la felicidad nunca es completa y si hay un hecho que ha marcado el final de años ha sido la grave lesión del portero Iván. Sus compañeros arden en deseos de regresar a la competición para dedicarle la próxima victoria. Un regreso que, en preferente, se alarga hasta la segunda semana de enero, cuando el Llosa visitará al Atzeneta.

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