La concejalía de educación del Ayuntamiento de Ontinyent, con la colaboración del Gabinete Psicopedagógico Municipal, ha organizado una nueva edición de la Escola de Pares i Mares pero esta vez con la finalidad de impulsar esta actividad dotándola de un nuevo formato. Se trata de una iniciativa con la que se pretende formar a los padres para hacer más fácil la relación con los hijos, y orientarlos en las técnicas o herramientas más adecuadas para cada problema o situación, con la intervención de psicólogos y especialistas.

Según explicaba el regidor de educación, Óscar Borrell, «los objetivos van a ser los mismos que en las anteriores ediciones, pero con actividades distribuidas por toda la población en diferentes colegios y centros para que todos los padres tengan al alcance poder asistir. Los temas responden a la demanda que nos habían transmitido los padres y madres y además hemos abierto la escuela de padres a la colaboración de entidades y asociaciones como la Universitat de València o Anima, lo que resulta muy enriquecedor», subrayó ayer.

El coordinador de Política para las Personas, Jaime Peris, destacaba por su parte que «las viejas premisas ya no sirven, las madres y los padres necesitan apoyo de cara a los cambios que estamos viviendo y tenemos que trabajar para apoyarlos cada vuelta más y mejor».

De este modo, ayer lunes tenía lugar la charla Dificultades de aprendizaje. Cómo detectarlas, en el colegio Carmelo Ripoll. Más adelante, y de la mano otros psicólogos y especialistas, se abordarán temas como «qué hago con las rabietas»; «técnicas de estudio, ¿cómo poder ayudar?», «¿come bien mi hijo?; «tengo un pre-adolescente en casa» o «educar con co-razón en la familia». Esta última charla será impartida por el escritor y conferenciante José Mª Toro, autor de varios libros sobre educación emocional.

Un curso descentralizado

Todas las actividades tendrán entrada libre y gratuita, y cada una tendrá lugar también en un espacio diferente: la biblioteca de Sant Josep, el edificio del Campus Universitario, los institutos Pou Clar y Jaume I, el colegio Sant Josep o el Teatro Echegaray, «para así descentralizar la escuela de padres y madres y que esta llego a todos los lugares», explicaba el regidor.