El último escrito que la abogada del constructor Asunción ha elevado al juzgado no solo corrige sustancialmente la querella inicial, sino que aprovecha para actualizar su contenido haciendo referencia a supuestos casos de corrupción que han salpicado recientemente a las adjudicatarias del vertedero de Llanera. Asunción involucra a dos protagonistas de la Operación Taula: el detenido Javier Luján y el empresario Ramón Lis. En su declaración judicial, Asunción apuntó a éste último, socio de Alfonso Rus, como el intermediario que le garantizó que se le adjudicaría la obra si pagaba una supuesta «mordida» de 3 millones. La jueza, sin embargo, ha dejado fuera de la causa la acusación de cohecho por falta de pruebas y se centra en determinar si en el concurso hubo prevaricación. El constructor presentó la querella poco después de morir Lis y de destaparse el caso Imelsa, tras las elecciones de 2015. La defensa de los investigados acusa a Asunción de aprovecharse del clima político valenciano «con mentiras».
