El concejal de Hacienda de Ontinyent, Joan Sanchis, ha puesto de manifiesto los beneficios que le reporta a la ciudad que la Generalitat haya liquidado la deuda que mantenía con Ontinyent por subvenciones aprobadas, concedidas y no pagadas, y que en 2011 alcanzaba los 3,5 millones de euros. Una deuda que a inicios del año pasado aún superaba los dos millones, la mayoría de ellos en ayudas del área de bienestar social, tal como avanzó el sábado este diario. El edil de Hacienda ha remarcado que con la gestión de la nueva administración autonómica «el Consell se pone al día con la ciudad y nos evita recurrir a préstamos para pagar a los proveedores, préstamos que además generaban intereses que asumía el ayuntamiento», incide Sanchis.

El edil expone que en el pasado, estos impagos «comprometían la liquidez de la tesorería municipal». Sanchis afirmaba ayer que «ya estaba bien de que el ayuntamiento hiciera de banco de la Generalitat. La situación que se han encontrado los nuevos responsables de las consellerias sabemos que es delicada, pero el hecho de que nos paguen en tiempo y forma el dinero que nos corresponde era una necesidad», señaló Sanchis. El gobierno de Ximo Puig ha saldado la deuda pendiente con Ontinyent, dejándola en unos 200.000 euros.