La explanada de la antigua fábrica de Tortosa y Delgado de Ontinyent estrenó ayer imagen y equipamiento como espacio recreativo, de esparcimiento y para el aparcamiento. Se trata de unos trabajos llevados a cabo por una escuela taller financiada con 300.000 euros por el Servef y también con una aportación del Ayuntamiento de Ontinyent; una actuación —señalaron ayer— que el alcalde, Jorge Rodríguez, destacaba como «de gran importancia, porque nos ha permitido mejorar las condiciones de una zona que se encontraba degradada, atendiendo una de las demandas vecinales de Ontinyent Participa, y al mismo tiempo ha servido para formar y dar trabajo a 30 personas durante seis meses», destacaba ayer el primer edil en una visita.
Rodríguez recorrió la zona ayer, acompañado de los regidores Rebeca Torró, Joan Sanchis, Pablo Úbeda, Manuel Cuesta y Sayo Gandia; la directora del taller, Gràcia Pallà; el exdirector del taller, Miguel Àngel Ferri; representantes de asociaciones de comerciantes y hosteleros, sindicales, así como profesorado y alumnado de cada una de las tres especialidades en que se han impartido: Instalación y mantenimiento de jardines y zonas verdes; Fábricas de obra y Gestión y supervisión del montaje y mantenimiento de redes eléctricas de baja tensión y alumbrado exterior. El alcalde explicaba que con las mejoras realizadas «esta zona tiene una salubridad que no tenía, y podrá acoger actividades con menos gastos de los que ocasionaba. Pero sobre todo, el alumnado va a poder salir al mercado laboral con más oportunidades y opciones de las que tenían», destacó.
Falta rematar la intervención
El alcalde, que posteriormente acudía a la Casa de Cultura para entregar un diploma a cada uno de los alumnos participantes, señalaba que las mejoras realizadas «han sido una primera fase muy importante pero en el marco de unas mejoras que retomaremos próximamente, puesto que una vez finalizan las obras de la Casa Barberà en el barrio de La Vila, por las cuales deben pasar camiones por esta zona, remataremos la actuación con la recuperación de los muros y la finalización de la instalación eléctrica. Todo ello para que la explanada pueda acoger todo tipo de acontecimientos con una seguridad y un grado de calidad que hasta ahora no podíamos ofrecer en este espacio», concluía.
