La asociación protectora de animales de Chella, Appache, ha rescatado en los dos últimos días a dos jóvenes podencas que habían sido arrojadas al paraje del Salto. Ayer, bomberos desplazados de Xàtiva tuvieron que intervenir junto al alcalde de la localidad tras advertir una voluntaria del colectivo animalista de los aullidos procedentes de una zona escarpada. El animal se hallaba en un lugar inaccesible, aunque finalmente pudo ser rescatado, con un dedo fracturado de una pata y un fuerte golpe en la otra, fruto de la caída desde una elevada altura. La perra estaba helada y hambrienta. «La intención era tirarla y que se matase, pero ha ocurrido un milagro», aseguraron desde Appache.

La misma voluntaria que dio el aviso ayer, el lunes había salvado a otro podenca que también había sido lanzada de forma salvaje al mismo paraje y que se encontraba cerca del río magullada, en una zona peligrosa llena de vegetación. La voluntaria, que acudió sola tras recibir una llamada de la Policía Local, recogió al cachorro de debajo de un árbol y lo puso en manos de una casa de acogida. Appache ha denunciado la crueldad y cobardía de estos abandonos en el Salto.