La villa romana del patricio setabense Publius Cornelius comienza a tomar forma en la primera planta de l'Almodí. El museo arqueológico de Xàtiva ultima a contrarreloj los preparativos del gran montaje expositivo del yacimiento descubierto en 2003 en una finca rústica de l'Ènova, durante las obras del trazado del AVE. Los restos, cedidos por el Museo de Prehistoria de la Diputación de Valencia tras cerca de dos años de gestiones municipales, permiten reconstruir las interioridades de la vida rural de la antigua Saetabis.

La exposición, que se abrirá al público mañana por la tarde, supone todo un acontecimiento para l'Almodí e inaugura un nuevo ciclo en el museo después de ser desposeído de gran parte de su colección de Bellas Artes, trasladada a la Casa de la Enseñanza en 2015. «Nunca habíamos tenido tanta arqueología como ahora», expone el director del complejo. Ángel Velasco avanza a Levante-EMV que el montaje será idéntico al que albergó el Museo de Prehistoria en 2013. Una vez cumplido el ciclo temporal en las instalaciones de Valencia, los restos permanecían retirados al público.

La muestra nace con una fecha oficial de inicio pero no de caducidad. La intención del ayuntamiento es que los restos se queden en la capital de la Costera y la exposición se convierta en permanente y en ello se centran los esfuerzos del área de Cultura. El regidor delegado, Jordi Estellés señala Villa Cornelius como «el primero paso hacia un proyecto riguroso» que persigue recuperar l'Almodí como espacio «de impulso cultural». Aunque advierte de que se trata de «un proceso lento y costoso», el edil anuncia que, en un futuro, en el museo se habilitará un aula colindante a la muestra, de carácter pedágogico y didáctico, donde los alumnos de la ciudad «puedan enriquecerse» y aprender con el material arqueológico.

Las excavaciones iniciadas en l'Ènova en 2004 pusieron al descubierto una superficie de 3.000 m2 correspondiente a una villa rústica de época romana, con una zona de vivienda y un área artesanal y de almacenaje dedicada al procesamiento del lino.

La gran cantidad de hallazgos recuperados durante la excavación evidenciaron que el propietario, Publius Cornelius Iuniani, fue un personaje rico e influyente de la aristocracia local de la Xàtiva romana, con residencia habitual en la ciudad de Saetabis. La villa se construyó entre los años 65 y 75 d.C. para la explotación de las tierras de cultivo y, según los estudiosos, permitía a Cornelius contar una gran residencia donde pasar temporadas de descanso.

Conflicto por los restos

Cuando la Conselleria de Cultura autorizó las primeras excavaciones en el yacimiento, el entonces director del museo de Xàtiva, Mariano González, quedó como legal depositario de los restos extraídos, en virtud del criterio de proximidad que fija la Ley de Patrimonio. Sin embargo, las innumerables piezas extraídas de la zona terminaron viajando al Museo de Prehistoria de Valencia. Los investigadores alegaron entonces que l'Almodí no reunía las condiciones exigidas para almacenar los restos. En 2014, el exalcalde de Xàtiva y expresidente de la diputación, Alfonso Rus, anunció que el material viajaría y se quedaría en la capital de la Costera. Aunque en 2015 inició los preparativos para exponerlo en l'Almodí, la muestra no ha fraguado hasta ahora por las dificultades técnicas que entraña.