El diseño del cartel de la Fira d'Agost de 2016 lleva la firma de Javier Mariscal y está inspirado en el retrato de Felipe V que cuelga cabeza abajo en el museo municipal Xàtiva, obra de Josep Amorós. La lámina fue presentada ayer en la nueva sala de prensa del ayuntamiento. Mariscal elogió el gesto de «rebeldía» que representa la decisión atribuida a Carlos Sarthou „exdirector del museo„ de voltear el cuadro del borbón que mandó incendiar la ciudad, «una rabieta simpática» que, a su juicio, ejemplifica «la lucha de David contra Goliat» y que se ha convertido en «un hito dentro de los referentes de identidad de Xàtiva».

El alcalde, Roger Cerdà, acompañó al creador durante la presentación del cartel y defendió el encargo al reconocido artista plástico valenciano „autor del mundialmente famoso Cobi„ dentro de la «línea de trabajo» recuperada en 2015, cuando el tripartito suprimió el concurso municipal que hasta entonces se convocaba para elegir el diseño y contrató al setabense Enrique García Lledó.

El alcalde subrayó que la obra de Mariscal permitirá engrosar la colección de arte del Museo de Bellas Artes, donde se colocará junto a las creaciones de otros diseñadores «multidisciplinares, valencianos y de prestigio» como Valdés, Armengol, Boix, Mompó, Heras, Toni Miró, o Genovés. «Si hubiéramos tenido que pagar cada original a precio de mercado, el gasto hubiera sido inasumible», manifestó Cerdà, para quien la apuesta por Javier Mariscal implica además «conectar con la tradición de los años 30 del siglo XX», cuando el cartel de la Fira d'Agost «ya se encargaba a diseñadores de la talla de Mongrell, Soler, Pons o incluso a un joven Renau».

El munícipe parafraseó a este último artista para señalar que «un cartel tiene que ser un grito en cada esquina». A partir de esa afirmación, valoró como «acertado» el «popular» motivo escogido por Mariscal para la Fira de 2016. «La paleta cromática ha sido muy bien resuelta para que destaque entre las miles de imágenes que observamos cada día. Con un golpe de vista se identifica la ciudad y lo que anuncia», apostilló el alcalde.

La primera vez del monarca

Mariscal „recientemente de actualidad por su alarmante situación económica„ agradeció el «gran honor» que representa el encargo y la «libertad» de la que ha disfrutado para materializarlo. El creador admitió que en un principio pensó que la imagen del borbón «ya se había utilizado con anterioridad» para el cartel. Al comprobar que no había sido así concluyó que «era un buen momento» para confeccionar una versión «muy simple» del cuadro de Amorós que permite una rápida identificación y ofrece connotaciones culturales. «Xàtiva es una ciudad que siempre te toca la fibra y que tiene mucha identidad», aseguró.

La contratación de Mariscal ha sido objeto de las críticas del PP, tanto por su coste „4.500 euros más IVA„ como por la supresión del concurso popular que se organizaba con anterioridad para elegir el diseño. Cerdà defendió ayer que la colección de arte gráfico del museo es «un referente» y apostó por su ampliación con obras como la del diseñador. La imagen del cartel de 2016 corrió como la pólvora por las redes sociales y generó gran debate, con opiniones muy confrontadas.