Los siete alumnos de 1.º de Bachillerato del colegio Pureza de María de Ontinyent que se habían quedado sin plaza por la rebaja de la ratio, no podrán estudiar al final en el centro. La Conselleria d'Educació hizo públicas anteayer las listas definitivas de los admitidos en los institutos y los siete estudiantes del colegio concertado ontinyentí no han sido incluidos el la lista del centro.
Los padres denunciaron la semana pasada, tras salir las listas provisionales, que siete estudiantes se habían quedado sin plaza. La rebaja de la ratio de 42 a 35 en las clases de 1º de Bachillerato privaba de plaza a siete estudiantes. De ellos, dos voluntariamente se buscaron otro instituto, pero los otros cinco pedían ser aceptados en el centro, por lo que presentaron alegaciones a la conselleria reclamando que no aplicara el decreto de la rebaja de la ratio, tal como explicó a este diario Mercedes Pastor, madre de un alumno afectado y concejala del PP en el Ayuntamiento de Ontinyent.
Pastor explicó ayer que la conselleria «no ha contestado a las alegaciones» que presentaron los padres conjuntamente, y que tras salir las listas definitivas «los siete alumnos se han quedado sin plaza». La madre y edil del PP manifestó que «todavía no sabemos qué vamos a hacer. No sabemos si vamos a emprender acciones judiciales» contra la aplicación del decreto de la ratio. Y es que cuando los estudiantes realizaron la preinscripción en el centro para 1.º de Bachillerato la ratio estaba en 42 alumnos por aula, pero después, en mayo, un decreto de la conselleria lo rebajó a 35. «Nos cambian las reglas cuando el partido ya está comenzado. El decreto salió cuando la preinscripción ya estaba en marcha», denunciaba Pastor la semana pasada.
Los padres se movilizaron y expusieron su caso en la última reunión del Consell Escolar Municipal, celebrado la semana pasada, a la que asistió una interventora de educación, a quien también explicaron su problemática. Recibieron el respaldo del consejo y del edil de Educació, Óscar Borrell, presente en el consejo.
Los padres confían ahora que se produzca alguna baja en el colegio Pureza de María y que alguno de los alumnos pueda seguir los estudios en el centro concertado. Los siete alumnos han realizado toda la etapa educativa en este colegio, desde infantil, primaria y secundaria. La conselleria les asignará un instituto de Ontinyent en el que haya plazas vacantes. «Nos impondrá el instituto público que tenga plazas», lamentaba Pastor, que denunciaba que «esta es la igualdad del embudo que propugna el nuevo gobierno de la Generalitat. Hablan de libertad de elección, pero nos impondrán el instituto», denunció ayer.
