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Calzada

Cuestionan el asfaltado de las calles de Sant Pere de Xàtiva

Los bordillos quedan por debajo de la capa de alquitrán y han sepultado un tipo de calzada tradicional

Cuestionan el asfaltado de las calles de Sant Pere de Xàtiva

Xàtiva ya puede añadir a su lista de asfaltados polémicos el que se ha llevado a cabo estos días en el barrio de Sant Pere. Fueron muy criticadas en su día (1996 y 2014) las operaciones de cubrición con alquitrán de la calzada de adoquines que llevó a cabo el equipo de gobierno de Alfonso Rus; en el primero de los casos para favorecer la disputa en Xàtiva de un criterium ciclista internacional en el que se retiró Miguel Induráin, en la avenida de Selgas, y en el segundo para dejar lisa la calle de la Reina. En ambos casos la izquierda, en la oposición, protestó de una manera más que airada.

Estas actuaciones de ahora „cuestionadas por colectivos como Iniciativa Cívica pel Centre Històric, uno de cuyos portavoces alertó a este diario, o por Amics de la Costera„ han consistido en el vertido de una gruesa capa asfáltica en la calle y plaza de Sant Pere, continuando por al calle l'Àngel hasta la unión con la plaza de la Trinitat. La intervención, en una zona muy sensible como es el casco antiguo, parece que no ha sido todo lo pulcra que cabría. Primero, porque la capa de alquitrán ha creado una elevación que deja muchos bordillos tradicionales de piedra casi al mismo nivel que la calzada o incluso por debajo. Y también porque la superficie sobre la que se ha actuado es característica de un modelo constructivo que, con este asfaltado, ha quedado sepultado. Se trataba de hormigón en el que eran visibles unos guijarros oscuros, aunque muy deteriorado en algunos tramos y con parches de capa asfáltica convencional. También apuntan que precisamente cuando una de las calles, l'Àngel, está en proceso de peatonalización intermitente, un asfaltado como éste la convierte en toda una invitación a que los vehículos tomen mayor velocidad gracias al renovado firme de ahora.

El concejal responsable de Movilidad en el Ayuntamiento de Xàtiva e impulsor de esta intervención, Miquel Lorente, explicó ayer a Levante-EMV que «no hay ningún motivo para alarma». En esas calles «no se ha actuado en casi 40 años. Lo criticable es eso, no que las hayamos repavimentado», recalcó. El concejal también niega cualquier exceso en el reasfaltado y asegura que se reunió con los técnicos municipales y les trasladó su petición de que la obra fuera «sumamente cuidadosa», insistía.

«No es ninguna improvisación»

Miquel Lorente puso también mucho énfasis en «aclarar» que, en contra de ciertas acusaciones que apuntaban a que el asfaltado se hizo con las sobras de los trabajos que se están realizando en los caminos de Bixquert, se trata de una actuación «totalmente independiente que nada tiene que ver con esa. Esta no procede ni del plan de viales ni del PPOS. Es una actuación de un plan de inversiones locales y además, está aprobada en junta de gobierno por unanimidad de todos los partidos. No es ninguna improvisación, si es que alguien quiere hacer creer eso». El edil también envió a este diario imágenes del estado de la calzada antes del asfaltado, en algunos tramos muy deteriorada, y negó que fuera un firme con valor patrimonial alguno. «Era asfalto parcheado, allí no había adoquín alguno ni elementos que preservar».

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