La biblioteca municipal de Navarrés acogió días atrás la presentación de Picaportes, una obra con la que Amparo Juan Calatayud, vecina de la localidad, realiza un recorrido sobre 42 picaportes —escogidos entre un total de 133 fotografías— de múltiples tipos; una forma, según afirmó en la presentación, de recordar y preservar para las próximas generaciones un elemento de la casa que, con la llegada de nuevos medios electrónicos ve próxima su desaparición.

La presentación del libro corrió a cargo de Vicente Blasco Argente, artista de Navarrés pero que reside en Barcelona, quien además se ha encargado de escribir la introducción del mismo. La editorial Babilonia-Asociación Cultural de Navarrés ha publicado en la primera edición un total de 100 ejemplares numerados dentro de la colección Papeles para mirar.

Los picaportes, según recordaron en el acto, encuentran su origen en la Edad Media. Por aquel entonces solían consistir en un anillo o argolla de hierro, pues además de su función sonora podían servir para atar las caballerías. En la época árabe se implantó la colocación de dos picaportes distintos en las puertas, que hacían sonidos diferentes. Así, las mujeres de la casa sabían si debían cubrirse el cabello en caso que fuera un varón adulto el que llamaba a la puerta. A partir del siglo XV el picaporte pasó a cumplir una función estética, y con el tiempo cada vez fueron adquiriendo formas más elaboradas. Pasó a mostrar, junto al diseño de la puerta, una imagen de la categoría de la vivienda.

Sobre la autora de la obra, Vicente Blasco y Sefa Guerrero, de la editorial Babilonia y presentadora del acto, la alabaron como una persona con una enorme sensibilidad artística. Esta obra, afirmaron, es un gran ejemplo de su afán por rescatar del olvido el patrimonio cultural mediante la fotografía. Amparo afirmó que espera que todos disfruten al descubrir la originalidad y belleza de los diseños que ha podido recoger.