Algunas de las principales calles de Xàtiva amanecieron el sábado „día de la cloenda de la Fira d'Agost„ plagadas de pintadas con simbología nazi y fascista. Fachadas de establecimientos comerciales y viviendas y elementos del patrimonio público fueron víctimas del spray de los intolerantes.

Si uno recorre las calles Gregorio Molina, Reina, Pintor Guiteras, Diputado Villanueva o la Baixada del Carme puede toparse con más de una decena de grafitis en los que se observan esvásticas, cruces celtas y saludos a Hitler en las paredes. También los hay en la Avinguda País Valencià o la Plaça Sant Jaume, donde el mural de homenaje a la republicana Patrocinio Camús ha sido objeto de una nueva agresión. Y ya van cuatro.

Los hechos, que tuvieron lugar la noche del viernes „cuando se celebraron los conciertos de La Raíz, Zoo y Dremen en La Murta„ fueron ayer condenados por el Consell de la Joventut de Xàtiva (CJX), que a través de un comunicado atribuyó las pintadas a «unos intolerantes que defienden un sistema asesino».

El CXJ: «Son delitos de odio»

El CJX denuncia que los «delincuentes» han vuelto a atacar con mensajes ofensivos el panel que rinde tributo a la setabense Patrocinio, que este año ya había tenido que ser repuesto tras ser diana de los vándalos. Se trata de la cuarta vez que se produce una agresión de este tipo en el vinilo, donde la luchadora republicana aparece junto a una bandera tricolor.

Según ha podido saber este diario, la Policía Local sigue el rastro de los posibles autores de las pintadas. Al parecer, una persona sin identificar ofreció a los agentes datos y características de un vehículo sospechoso que podría haber sido empleado por los incívicos grafiteros para desplazarse por las calles de Xàtiva esa noche.

El testigo habría presenciado los hechos e incluso habría aportado fotografías del citado coche, cuyos datos, sin embargo, no han trascendido. Fuentes policiales indican que existen indicios que podrían ayudar a localizar a los autores, aunque la investigación continúa abierta a falta de corroborarlos con nuevas pesquisas. El Consell de la Joventut manifestó ayer que las pintadas «incitan y fomentan la intolerancia, la violencia y el crimen en espacios públicos» y pidió que «no queden impunes» porque «no son simple vandalismo, sino crímenes de odio». «Queremos una sociedad diversa, justa y libre y esos símbolos representan todo lo contrario», añadió la organización el comunicado. «Queremos responsables: es necesario para hacer ver que estos actos son castigados», zanjan los representantes juveniles.