El alcalde de Albaida, Josep Albert, subraya la necesidad de actualizar el PGOU de la localidad para desencorsetar la normativa, incentivar la actividad económica y dar solución a una serie de conflictos surgidos en los últimos 10 años. Albert recalca que todas las alteraciones cuentan con el visto bueno de los técnicos. «Las normas urbanísticas están vivas y han de ir adaptándose a los tiempos, respetando el sentir de la ciudadanía», observa.