Después de más de una década, las puertas de la histórica Casa Artigues volverán a abrirse al público este lunes, una vez completada la inversión de 30.000 euros que ha permitido acondicionar el interior de este edificio del siglo XVIII situado en la calle Noguera. Lejos de permanecer vacía de contenido, la antigua Botica Central se transforma en la nueva sede de la concejalía de centro histórico: una oficina de proximidad para los habitantes de esta zona de la ciudad que aglutinará todas las gestiones y expedientes relacionados con el casco antiguo.
Las nuevas dependencias municipales tramitarán las solicitudes de ayudas a la rehabilitación de inmuebles de los vecinos que se acojan al Plan Impuls „bautizado así por el ayuntamiento„ y financiado con fondos de la Generalitat y el Ministerio. El consistorio ha externalizado el servicio técnico de atención a una empresa formada por cuatro arquitectos para agilizar al máximo los trámites administrativos previos a la reforma de las viviendas.
El arquitecto Vicent Torregrosa y la restauradora Eva Gomis desgranaron ayer los detalles de las obras desplegadas en la Casa Artigues, en el marco de una visita institucional a la que no faltaron el alcalde de Xàtiva, Roger Cerdà, y diversos concejales. Los trabajos en el inmueble „sufragados casi por completo por la diputación„han consistido en la remodelación integral de la planta baja del edificio. Además, los operarios han pintado y restaurado las puertas de la planta superior.
En las nuevas dependencias también se ubicarán los servicios técnicos de la conselleria de Urbanismo, por lo que desde la casa Artigues se gestionará cualquier ayuda o tramitación independiente del plan Impuls. El alcalde subrayó que la reforma del inmueble «da contenido al patrimonio de la ciudad para ponerlo en valor, evitar su degradación y favorecer que sea conocido por la ciudadanía y los turistas». Para la regidora de Urbanismo, Cristina Suñer, «es el primer paso para dar de nuevo vida al centro histórico de Xàtiva».
En la misma línea, el concejal de Patrimonio Histórico, Jordi Estellés „que tendrá su nuevo despacho en el edificio„ recuerda el compromiso de recuperar la Casa Artigues adquirido por el equipo de gobierno y hace hincapié en que la intención del consistorio es «seguir abriendo servicios en el centro histórico hasta el final de la legislatura».
Siete personas ofrecerán atención al público en la nueva instalación municipal, que permitirá aligerar la burocracia que actualmente retrasa cualquier intervención en el casco antiguo „condicionada al permiso expreso de Patrimonio„ especialmente cuando se ponga en marcha el Plan Especial del conjunto histórico
Antes de la reforma, el interior del edificio permanecía degradado como consecuencia de su falta de uso desde el cierre de la Oficina del consumidor hace 10 años. En 2006, la casa fue objeto de una reforma que devolvió a la fachada su esplendor original. El inmueble posee tres elementos patrimoniales especialmente valiosos: la marquesina de estilo ecléctico que mezcla modernismo y neogótico, el famoso retablo cerámico de estilo rococó que retrata a los personajes ilustres de la ciudad „único por sus dimensiones y su composición„y las estanterías modernistas de la antigua Botica, restauradas para la ocasión.
4,5 millones de euros en ayudas
La oficina técnica del Plan Impuls abrirá los lunes, miércoles y viernes de 11 a 17 horas, aunque el consistorio no descarta ampliar el horario en un futuro. Este programa prevé una inyección de 4,5 millones de euros de fondos estatales y autonómicos para rehabilitar 100 casas del casco antiguo y el Carmen de Xàtiva. Los interesados pueden acogerse a las ayudas hasta diciembre de 2017. El dinero podrían comenzar a llegar a principios de año. El ayuntamiento costea el mantenimiento de la oficina y la urbanización y retirada de cableado eléctrico de diversas calles.
