Terremoto en el Ontinyent CF. El presidente Luis Ortiz anunciaba su dimisión en el transcurso de una convulsa asamblea extraordinaria celebrada el pasado sábado. «El único motivo ha sido el incumplimiento por parte del ayuntamiento en atender el compromiso económico con el club», ha explicado Ortiz. «En julio de 2015 „continúa„, solicité al alcalde una ayuda económica dado que la subvención de 40.000 euros iba dirigida íntegramente a la deuda del club. Es una cantidad excesiva e, incluso, inmoral para los tiempos que corren, pero, técnicamente, el Ontinyent CF no dispone de ese dinero porque en asamblea se aprobó que era para pagar la deuda. En esta tesitura, le pido 20.000 euros como aportación extraordinaria y Jorge Rodríguez se compromete y me manda un borrador. La ayuda no era a cambio de nada, sino de una serie de obras en El Clariano que ya se han realizado y que se pueden ver. Llegado el mes de enero, la subvención nos llega por 40.000 euros y nosotros reclamamos los 20.000 restantes. Se me dice que llegarán más tarde a través de la Diputación, pero la realidad es que pasan los meses y el dinero no llega», denuncia el directivo.

Ortiz, que ayer por la tarde compareció para exponer los motivos de su dimisión, señala que «a la vista del retraso, acordamos con el ayuntamiento contratar un préstamo por nuestra cuenta para poder cerrar la temporada y ya se liquidaría cuando llegaran los 20.000. Nos plantamos en el mes de octubre y seguimos en las mismas. Solicito reunirme con algún responsable y todo el mundo se me escapa como un pez. Finalmente, el alcalde nos llama y cuando nosotros pensábamos que era para darle una solución al tema, resulta que no hay solución».

«Solo promesas» del alcalde

Según Luis Ortiz, «es una pena que todo esto ocurra, pero es algo que le advertí en su día al alcalde. Con buena voluntad por parte de todos podíamos salir por la puerta grande, pero de lo contrario saldremos por la puerta de atrás, como así ha sucedido. Que quede bien claro que la relación que hemos mantenido con el ayuntamiento hasta hoy ha sido extraordinaria, aunque al final todo se haya quedado en promesas», lamenta el exdirigente. Ortiz advierte que la dimisión «no es una medida de presión. El señor Manuel Cuesta, concejal de Obras, en uno de los dos patinazos que ha tenido en la asamblea, ha dicho que a mi me viene muy bien la excusa de los 20.000 euros para irme a mi casa y yo le he lanzado un órdago. Si cree que todo esto es un farol, que nos den los 20.000 ? del año pasado y en enero 40.000 más 20.000 y yo me quedo. El que se dé por aludido que recoja el testigo».

Por último, Ortiz también ha lamentado «la falta de terrenos de juego para poder entrenar. Es una vergüenza. No estamos disconformes con las obras en El Clariano, ni cuándo se van a hacer, ni el período de duración de las mismas. Asumimos todos los inconvenientes que vamos a tener por trasladarnos a Aielo, pero en lo que no podemos estar de acuerdo es que no haya un terreno de juego en Ontinyent para poder entrenar la primera entidad deportiva de la ciudad. Hemos llamado a todas las puertas y nos han dado con ellas en la nariz, cuando no hace mucho tiempo los campos de la Puríssima estuvieron durante cuatro meses en obras y ningún niño se quedó sin entrenar ni ningún partido se tuvo que suspender», ha concluido el que ha sido presidente del Ontinyent CF hasta ahora.