El Ayuntamiento de Xàtiva ha adjudicado a la empresa Dornier, SA el nuevo contrato del servicio de vigilancia y regulación de aparcamiento de vehículos en la vía pública. Como ya avanzó Levante-EMV, el pliego reduce un 30% el número de plazas de zona azul respecto a la anterior concesión municipal „de 835 a 482„ y elimina la obligación de pagar por estacionar en zona regulada los sábados por la tarde.

La nueva gestión de la ORA contempla un sistema informatizado de control horario a través de nuevas máquinas expendedoras y un software específico que permitirá al consistorio llevar un seguimiento a tiempo real del estado de los aparcamientos y de las infracciones detectadas. Para el usuario también habrá ventajas: podrá pagar con tarjeta magnética, vía web y a través de una aplicación móvil (app). El regidor de Movilidad, Miquel Lorente, subraya que Xàtiva será pionera en la provincia de Valencia con la creación de dos plazas para la carga de coches eléctricos en la Avenida Jaume I.

Por otro lado, se habilitarán 21 plazas de zona verde en la calle Caldereria para asegurar una mayor rotación e incentivar al comercio y la hostelería del casco antiguo. En la calle de la Reina, la adjudicataria tendrá que acondicionar un nuevo aparcamiento de 36 plazas de zona azul a la altura del número 14. Los controladores del servicio dispondrán de terminales portátiles PDA para gestionar las infracciones. Pese a la reducción de plazas de zona azul, Lorente garantiza el equilibrio económico de la concesión: no se prevé una caída de los ingresos. En lugar de un canon anual específico, la adjudicataria destinará las arcas municipales el 46% del porcentaje de la recaudación anual. Dicho de otro modo: de cada euro que el usuario consuma en zona azul, el consistorio recaudará 46 céntimos. Dornier se impuso en el concurso a las otras cuatro competidoras gracias a una oferta económica mucho más barata para la administración local. Sin embargo, la firma presenta la peor valoración técnica, circunstancia que el PP y Ciudadanos han echado en cara al gobierno municipal. La empresa adjudicataria de la ORA, que también presta el servicio en Valencia, prevé unos ingresos de entre 350.000 y 500.000 euros al año.

Otro beneficio del nuevo sistema es que el usuario podrá recuperar el imponer abonado por el tiempo finalmente no consumido a través de la aplicación o modificar el horario de estacionamiento sin la necesidad de acudir al terminal físico ubicado en la calle.

Reducción en zonas residenciales

Otra condición fijada a la empresa en el pliego es la obligación de subrogar a los nueve trabajadores de la actual concesión. La idea fuerza del nuevo servicio, según recalca el edil de movilidad, es reducir plazas de zona azul en zonas residenciales y mantenerlas en el eje comercial. En el nuevo mapa de la ORA desaparecen los aparcamientos de pago en las calles Abn Hazam, Escultor Esteve, Maulets y Sant Jordi.

La adjudicación se aprobó en el pleno del pasado sábado. El consistorio ha requerido a la nueva concesionaria que presente toda la documentación para formalizar el nuevo contrato. A partir de ahí, Dornier dispondrá de tres meses para iniciar el nuevo servicio con los cambios acordados. Una comisión técnica integrada por representantes de la firma y del ayuntamiento velará por el cumplimiento del contrato y el buen funcionamiento del servicio.