El gobierno municipal de Navarrés dio luz verde al presupuesto de 2017 en el pleno del 29 de diciembre con el voto favorable del PP y de Ganemos y el rechazo del PSOE. Los socialistas han querido explicar el sentido de su voto contrario argumentando que no han participado en la elaboración del documento contable que rige la gestión del próximo ejercicio «a pesar de nuestro ofrecimiento a ocupar cualquier concejalía».

Por otra parte, en un comunicado, el PSOE censura que las inversiones «han sido determinadas sin contar con la participación ciudadana». Para 2017, el consistorio de Navarrés tiene previsto el doble de ingresos por la vía de las transferencias de capital —sobre todo aportaciones de la Diputación de Valencia— hasta presupuestar 265.000 euros. A juicio de los socialistas, «sería un buen momento para llevar a la práctica la participación ciudadana y someter a consulta popular en qué quiere el pueblo gastarse el dinero que paga con sus impuestos».

Por último, los socialistas también cuestionan que, a pesar de la promesa de la alcaldesa de bajar los impuestos, la recaudación por tributos directos del ayuntamiento pasará de 1.065.270 euros en 2016 a 1.146.597 ? en 2017, un incremento de 81.323,73 euros. Además, añaden, pese a la reducción del tipo impositivo del IBI aprobada por el consistorio, la revisión catastral efectuada por el Ministerio de Hacienda desemboca en un aumento de ingresos de 67.794 euros —de 710.000 euros a 777.794 ? en 2017—. «Ante este modo de gobernar, los socialistas mostramos nuestra oposición a unos presupuestos en los que no participamos, no se tiene en cuenta al pueblo y que suponen una subida de impuestos», apostilla el comunicado del PSOE.

Amortiguar la subida

Como ya informó este diario, el equipo de gobierno achaca la subida de ingresos del IBI a la actualización de valores catastrales de algunas viviendas como consecuencia de la revisión de la ponencia de Catastro, que ha hecho incrementar la base imponible sobre la que se calcula el tributo.

La alcaldesa Estela Darocas (PP) anunció una reducción del coeficiente del impuesto (situado al 0.70) para amortiguar la subida y compensarla en el recibo. En el pleno, la munícipe subrayó el objetivo de que el ayuntamietno sea «una institución bien gestionada y solvente que reduzca el endeudamiento y se rija por el equilibrio presupuestario». El presupuesto del consistorio para 2017 incrementa ligeramente el gasto corriente y asciende a 3,16 millones de euros.