La Guardia Civil ha detenido a cuatro personas e investiga a una quinta por su implicación en las pintadas que aparecieron el pasado 7 de enero sobre la estatua dedicada al torero Enrique Ponce en su localidad natal, Chiva, y en una iglesia del mismo municipio. La Benemérita las acusa de implicación en delitos de incitación al odio por tales actos. Los implicados son dos mujeres menores de edad y tres varones de entre 18 y 23 años, todos ellos de nacionalidad española.
El día 7 de enero tanto la estatua de Enrique Ponce como una iglesia de Chiva amanecieron manchados con pintura de varios colores, sobre todo el rosa en el caso del monumento al torero. Ante ello, la Guardia Civil activó la operación «Espray» por parte de agentes del Área de Investigación del Puesto Principal de Chiva y del Equipo de Policía Judicial de Riba-roja de Túria.
Al parecer, los autores de estos sucesos compraron el mismo día de los hechos, el 6 de enero, varios botes de pintura en spray en un establecimiento de la localidad. Tras ello, estas personas embadurnaron de color rosa la estatua de Ponce, y pintaron quince cruces invertidas de color rojo y escribieron tres veces la palabra «asesino».
Según el Instituto Armado, los implicados iban provistos de mochilas para llevar los botes de pintura, así como de sudaderas para cambiarse. Uno de los hombres presuntamente ordenó y participó junto a los otros dos en la realización de las pintadas, mientras que las dos mujeres ejercían labores de vigilancia y aviso.
Además, la Guardia Civil implica a estas personas en la comisión de 30 infracciones administrativas por daños o el deslucimiento de bienes muebles o inmuebles de uso o servicio público, así como de bienes muebles o inmuebles privados en la vía pública.
Las diligencias han pasado a disposición judicial del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción n.º 3 de Requena así como a la Fiscalía de Menores de Valencia.
