Partido trampa. El Ontinyent CF no se fía lo más mínimo de la mala clasificación del CD Torrevieja, con el que se medirá en la matinal del domingo. Y es que el conjunto salinero ha sido el más activo en el mercado invernal en un último intento de darle la vuelta a la situación para que el equipo no pierda la categoría. Los siete puntos que le separan en estos momentos de los puestos de permanencia ponen en evidencia la mala campaña que está completando una de los escuadras llamadas a pelear al principio por los puestos de honor.
Pese a ello, el grupo dirigido por Antonio Pedreño no arroja la toalla y a la desesperada ha tratado de rearmar el bloque para mejorar el nivel competitivo ofrecido en la primera vuelta. Hasta seis jugadores nuevos han aterrizado en Torrevieja para revertir la dinámica. A punto estuvieron de cimentar la primera piedra de la reacción la pasada jornada en Novelda, pero un gol in extremis de los locales les devolvía a la realidad (1-0). Para más inri, el tanto noveldense lo anotaba Zapata, que empezó la temporada con los blanquiazules. Eso sí, el equipo de Pedreño dio una imagen muy mejorada respecto a la tónica habitual de la temporada. Ese cambio es un aviso para navegantes.
De ahí, que Miguel Ángel Mullor opte por no mirar la clasificación para centrarse en la nueva cara torrevejense. Ni que decir tiene que para el cuadro de la Vega Baja todo son finales y recibir al Ontinyent no es una excepción. Los blanquinegros se van a encontrar un rival desesperado por puntuar y que no tiene más remedio que salir a por todas. Tocará estar muy despiertos y nunca mejor dicho, ya que el hecho de jugar por la mañana tan lejos de casa siempre supone un inconveniente.
Sanción a Francesc
No será el único para Mullor, que sigue sin poder recuperar al delantero Abengózar, una baja especialmente dañina ahora después de que Francesc haya sido castigado con cuatro partidos por el comité de competición tras su expulsión contra el Alzira. Así que Cristo se convierto en la única arma ofensiva para apretar al Torrevieja. El extremeño se encuentra ante su gran oportunidad, ya que va a gozar de muchos minutos las próximas jornadas para tratar de redondear sus buenas actuaciones con goles, que se le resisten hasta ahora.
El Ontinyent necesita una mayor aportación anotadora de la gente de arriba, pues sigue siendo el que menos marca de los cuatro primeros. Una situación que le obliga a vivir muchos partidos en el filo de la navaja. Afortunadamente, el buen nivel defensivo del equipo está permitiendo que los blanquinegros saquen el máximo provecho a sus dianas. Marcar a domicilio está siendo sinónimo de puntuar. De hecho, la última vez que el Ontinyent se quedó sin mojar fue en Castellón y acabó perdiendo (1-0). Aprendida la lección de Castalia, los de Mullor saldrán en Torrevieja en busca del gol para evitar sorpresas. El encuentro se disputara mañana domingo (11:45) en el Estadio Municipal Nelson Mandela de la ciudad salinera, con arbitraje de José Romero Pérez.
