Un helicóptero de Emergencias de la Generalitat Valenciana rescató a primera hora de la mañana de ayer el cuerpo sin vida de la espeleóloga Ana Isabel M. D., fallecida la tarde del domingo, como informó Levante-EMV ayer, en una actividad desarrollada en una sima de 40 metros de profundidad situada en el Molló de la Creu, dentro del término de Gandia. Tras rescatar el cadáver de la mujer, de 54 años y residente desde hace poco tiempo en Xàtiva, se puso a disposición del servicio forense para que se le practique la autopsia.
El helicóptero de la Generalitat regresó a primera hora de la mañana de ayer al Pou de l´Abisme, como se llama el lugar del accidente, donde durante toda la noche dos rescatadores de los bomberos del Consorcio Provincial de Valencia permanecieron junto al cuerpo de la fallecida, que fue rescatado el mismo domingo pero que no pudo ser evacuado de ese lugar por los riesgos que suponía para el personal desplegado, dada la complicada orografía del terreno montañoso.
Según han trasladado su compañeros, Ana Isabel fue víctima de una fatalidad mientras practicaba la espeleología, una actividad deportiva a la que era aficionada, dado que era integrante de un club de Murcia que hacía rutas por distintos lugares.
La fallecida sufrió el fortísimo golpe de una piedra que se desprendió desde la zona alta de la montaña y que le impactó en la cabeza, llegando incluso a deformarle el casco protector que llevaba puesto. Varias personas del mismo grupo de espeleólogos pudieron esquivar la piedra alertados por uno de los integrantes que vio caer el objeto, pero la mujer fallecida no tuvo esa suerte.
Todos los miembros de la expedición estaban perfectamente equipados y reunían el material apropiado para la actividad, pero el golpe de la piedra fue brutal.
El aviso del accidente se recibió sobre las 15.25 horas del domingo, y hasta el lugar se trasladó un grupo de rescate del Consorcio de Bomberos de Valencia, al que posteriormente se sumaron bomberos de Alicante y un helicóptero de la Generalitat que se tuvo que retirar cuando anocheció.
La zona donde se produjo la caída de esta mujer de mediana edad era de muy difícil acceso terrestre, por lo que las labores de rescate prolongaron durante varias horas. Una vez rescatado el cuerpo, el personal desplegado en la zona valoró el riesgo y decidió esperar al amanecer para evacuar a la víctima, debido a los riesgos que esta operación entrañaba para todos.
Atendida por ataque de ansiedad
Durante la tarde del domingo una mujer que formaba parte del club de espeleólogos sufrió un ataque de ansiedad al comprobar que su compañera había fallecido ap consecuencia del golpe de la piedra. Por ello fue trasladada hasta un centro de salud de Gandia, donde fue atendida.
