Treinta años después de la primera instalación del monumento en homenaje al académico José Antonio Maravall Casesnoves, ayer se celebraron los actos de reposición del busto dedicado a este insigne hijo de la ciudad de Xàtiva. La programación arrancó con una recepción del alcalde, Roger Cerdà, y la corporación a una representación de los familiares del académico, encabezada por sus hijos Agustín, Fernando y Mª Teresa. A continuación, la comitiva se desplazó al instituto José de Ribera, donde los prestigiosos historiadores José Álvarez Junco y Carmen López Alonso disertaron sobre la figura de Maravall; el período histórico que vivió y su obra y trayectoria científica. Finalmente, los actos concluyeron con la inauguración del nuevo monumento dedicado al académico, situado junto al instituto José de Ribera, en la avenida a la que este hijo ilustre de Xàtiva da nombre.

Durante su parlamento, el alcalde destacó que «el acto de hoy se inscribe en la línea iniciada por el equipo de gobierno, bajo el impulso del área de Cultura, consistente en dignificar y honrar la memoria de tantos y tantos hijos ilustres que la ciudad de Xàtiva ha visto nacer». Según Cerdà, «contribuimos así a un mayor conocimiento de la historia de la ciudad y de sus personalidades, ya que es nuestra obligación como gobernantes fomentar la cultura y el conocimiento de la obra de otros setabenses que contribuyeron al progreso y mejora de nuestra sociedad en diversos ámbitos de la ciencia, la educación, la cultura o las artes», resumió.

Por su parte, el concejal de Cultura, Jordi Estellés ha señalado que «sin duda, Xàtiva estaba en deuda con su hijo más brillante del siglo XX, José Antonio Maravall Casesnoves. Con el intelectual inacabable, con el profesor y maestro que impulsó a decenas de jóvenes investigadores y que puso las bases en España de lo que se ha venido a llamar Historia de las Ideas», según subrayó ayer el regidor.

Arrumbado por Rus en 2007

En 1987, el alcalde socialista Miquel Calabuig, acompañado por el Consell Valencià de Cultura en pleno, inauguró el primer monumento al académico Maravall en la plaza de Sant Jaume, muy cerca de la casa donde nació el profesor. Al acto acudió, entre otros, el entonces ministro de Educación del ejecutivo de Felipe González, José Mª Maravall. El busto sufrió diversos actos vandálicos y llegó a ser robado y posteriormente recuperado. En 2007, el equipo de gobierno de Alfonso Rus llevó a cabo una reurbanización de la plaza, eliminando el busto de Maravall. Hasta ahora, la escultura permanecía arrinconada en las dependencias de la brigada municipal de obras.