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La Canal de Navarrés no tiene quien le escriba

La comarca de la Canal de Navarrés constituye uno de los territorios de las comarcas centrales valencianas con peores perspectivas de futuro si nos atenemos a los actuales indicadores socioeconómicos. Las amenazas sobre la sociedad que vive en esta extensa área son diversas. La despoblación por la marcha de los jóvenes y el descenso de la natalidad, la baja renta per capita originada por una debilidad de las actividades económicas endémica, la falta de servicios e infraestructuras... Como contrapartida, los valores naturales y las posibilidades de desarrollo en campos como la industria agroalimentaria de calidad o el turismo, ambos sostenibles y respetuosos con la naturaleza, convierten a esta comarca en una tierra con clara viabilidad en un futuro. La condición indispensable para que este desarrollo se haga efectivo pasa por la reflexión y la puesta en común de las diferentes concepciones que las personas de la Canal de Navarrés tenemos sobre nuestra propia situación.

En esta línea, la de promocionar la investigación y la generación de propuestas socioeconómicas, trabaja desde años atrás el Instituto de Estudios Territoriales del Caroig (IETEC). Con una concepción abierta e integradora, cuenta entre sus logros acciones de promoción de los valores de esta comarca, así como del conjunto de localidades que comprenden el territorio del macizo del Caroig. El IETEC, nacido prácticamente sin apoyos institucionales, ha estado trabajando, convocando y difundiendo en sus publicaciones ideas y reflexiones nacidas del ámbito académico y social. Esta actividad puede constituir el germen de un futuro viable y prometedor para unas gentes y un territorio actualmente castigados con dureza por la crisis económica general y por la falta de atención e inversiones por parte de las instituciones supramunicipales; sirva como prueba la reciente presentación de los cuadernos comarcales Presente y futuro de la Canal de Navarrés.

Las instituciones que estructuran esta comarca, ayuntamientos, mancomunidad y en diferente nivel, Diputación y Generalitat, han mantenido una actitud de apoyo a las acciones del IETEC relativo, ocasional y con frecuencia centrado únicamente en acciones concretas. Con estos apoyos y algunas aportaciones privadas se han podido financiar publicaciones, jornadas y congresos.

Lo preocupante es que en la actualidad, a medio camino de la legislatura local, han comenzado a aparecer denegaciones, renuncias y claros obstáculos institucionales a una labor de interés social. Parece como si los políticos locales y comarcales, siempre dependientes de sus calendarios electorales, hubieran establecido el ecuador de la legislatura para comenzar a transformar lo que era un tibio apoyo en una cierta hostilidad para con quien solo difunde pensamiento y propone ideas para un mejor futuro. Mancomunidades como la de la Canal, se contradicen en el cumplimiento de compromisos adquiridos; otros, marcan una cierta distancia. Y finalmente otras entidades, por ejemplo el Ayuntamiento de Enguera, comienzan a dejar entrever una cierta frialdad para con esta labor, cada vez más evidente, y no dan respuesta a las diferentes propuestas y necesidades planteadas.

Los intereses de nuestras políticas y políticos una vez más, parecen anteponerse al interés común y a las iniciativas de la sociedad civil. Lo que aparenta ser una acción bastante generalizada de retirada de apoyos al trabajo investigador y difusor del IETEC no tendrá otro efecto que evidenciar las verdaderas intenciones de algunos alcaldes o alcaldesas a la vez que deja clara su falta de interés por el territorio, la cultura... Como decía José de Vasconcelos, «la cultura engendra progreso y sin ella no cabe exigir de los pueblos ninguna conducta moral».

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