Armados con un bolígrafo y una colección de multas en blanco, medio centenar de alumnos de 3º y 4º de Primaria recorrieron ayer las calles de Xàtiva a la caza de infracciones de tráfico. Los vehículos mal estacionados y los conductores incívicos fueron la principal diana de estos aprendices de Policía Local por un día, instruidos por agentes uniformados.

El ejercicio de pedagogía vial se inscribe entre las actividades programadas por el ayuntamiento en el marco de la Semana de la Movilidad. Los menores, que estudian en el CEIP Taquígraf Martí, tuvieron en sus manos el poder de castigar -al menos moralmente- a quienes se saltan las normas de circulación o son poco respetuosos con los derechos de los peatones. Y no desaprovecharon la oportunidad. Los niños se hincharon a poner multas simbólicas. Los coches y motos que invaden a diario las aceras y obstaculizan la circulación en buena parte del casco antiguo concentraron la gran mayoría de las sanciones.

En las papeletas, colocadas en los parabrisas u otros lugares visibles, los participantes debían exponer los motivos de la sanción. Los infractores tienen suerte: esta vez no habrán de pagar. En algunos casos se encontraban almorzando en el bar o en las inmediaciones de los vehículos mal estacionados y se toparon con la «policía infantil», que tenía el deber de explicarles (entre sonrisas) el porqué de la medida de escarmiento.

Cinco actividades pedagógicas

El coordinador del área de Seguridad Vial de la Policía Local de Xàtiva, Arturo Tormo, ejerció de guía e instructor de los alumnos, acompañados a lo largo de un recorrido de hora y media por las tres regidoras de Compromís responsables de organizar la iniciativa, junto al edil de Movilidad y el personal docente. La Semana de la Movilidad se compone de 5 actividades pedagógicas y de concienciación vial que persiguen avanzar hacia una movilidad sostenible y una convivencia cívica en las calles. Cada una la desarrolla un partido político.