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El ilustrador Vicent Beneito rescata el juego tradicional en «Se fue la luz»

El cuento, dirigido a niños y adultos, está a la espera de conseguir financiación en Verkami

«En la sociedad en que vivimos, una mayoría de niños y adultos prefieren contactos y entretenimientos virtuales a través de dispositivos electrónicos, y dan la espalda al contacto con la realidad que les envuelve». Es el diagnóstico condensado de Vicent Beneito de los problemas de padres e hijos para abandonar el asiento frente al televisor y salir a la calle, al jardín o al parque a jugar. Unos, por falta de tiempo; los otros, por la falta de alguien que les acompañe y bla bla bla.

Se fue la luz es, pues, la aportación del autor ontinyentí para intentar recuperar ese espacio de juego para los niños más allá de su casa. Ya escrito e ilustrado, el cuento está ahora publicado en la página de crowdfunding Verkami, a la espera de la financiación suficiente para que pueda comenzar a imprimirse. Los mecenas pueden comprar el libro por adelantado junto a otros regalos en función de la cuantía de su aportación. Hay disponible incluso un pack para centros educativos, con quince volúmenes del libro.

El cuento narra la historia de Daniel, un niño «acostumbrado a tener lo que quiere y a jugar únicamente con la tecnología que le envuelve», según describe su autor. Durante una tempestad, un apagón provoca que Daniel no pueda seguir jugando a la consola, y su madre abandona sus quehaceres para jugar con él en el jardín, «en una aventura de descubrimiento con los cinco sentidos». Cuando la electricidad se reestablece, Daniel se da cuenta de que «cosas que tenía por aburridas, pueden ser divertidas si son transmitidas de forma adecuada».

En efecto, Beneito ha querido dedicar Se fue la luz no solo para los niños, también para sus padres. A lo largo del cuento, se les ofrece a los adultos algunas pinceladas de la manera en que se pueden dirigir a los pequeños. «No deben ser una molestia, alguien a quien dejar delante de la tele para que dejen a los adultos en paz: son personitas para quienes todo es nuevo, y a quienes se debe poner en contacto con el mundo que les rodea», resume Beneito. Se fue la luz, en definitiva, invita con texto y dibujos a rescatar la diversión tradicional, alejada de las pantallas. Un manual para padres e hijos.

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