Hace tres décadas, un vecino de Bellús podía viajar a Xàtiva en autobús hasta tres veces al día. Hoy, en esta localidad de 320 habitantes separada por diez kilómetros de la capital de la Costera solo puede cogerse el transporte público una vez a la semana,el martes por la mañana. La línea regular que, partiendo desde Atzeneta d'Albaida, conectaba con Xàtiva a 12 municipios de la Vall d'Albaida -siete de ellos de menos mil habitantes- está a punto de cumplir tres años y medio fuera de servicio.

La caducidad del contrato y su carácter deficitario paralizaron el expediente de la nueva licitación, a pesar de que el proyecto llegó a sacarse a información pública. En julio de 2014, los ayuntamientos de Bellús, Guadassèquies, Benissuera, Alfarrasí, Montaverner y Bèlgida se unieron para compartir los costes del autobús y cubrir al menos un trayecto de ida y vuelta a la semana con fondos municipales. Con el cambio político tras las elecciones autonómicas de 2015, la reactivación del servicio regular se aplazó sine die. La dirección general de Transportes pidió un tiempo para examinar con calma la manera de financiar el contrato y para diseñar un nuevo proyecto, comprometiéndose con los municipios afectados a ofrecer una solución antes de que acabara 2017.

Por ahora, sin embargo, todavía no hay ninguna propuesta ni ninguna fecha encima de la mesa. La alcaldesa de Bellús, Susana Navarro, no oculta su preocupación por la falta de información sobre el estado de la tramitación de la nueva línea. La suya, recuerda, es una localidad con una población envejecida que depende del autobús para efecutar múltiples gestiones en Xàtiva: desde ir al banco o acudir a la consulta del médico especialista hasta comprar en el supermercado. En la misma tesitura se hallan los otros poblets del riu afectados por el retraso: Sempere, Guasdassèquies, Benissuera y Alfarrasí son núcleos de población reducidos que carecen de otras vías de comunicación.

Alerta por la despoblación