Cada dos años Xàtiva se convierte en la capital del grabado. Y esa capitalidad se sustanció anoche, de nuevo, con la inauguración de la que es ya la edición número 14 de la Bienal Internacional Josep de Ribera. El certamen suma a su historial el nombre de Alberto Rincón (Bogotá, 1954), quien con la obra Emigrante se embolsa los 4.500 euros del premio. El alcalde, Roger Cerdà; el edil de Cultura, Jordi Estellés, y el presidente del Club Rotario, Francisco Baima, inauguraron ayer en la Casa de Cultura la exposición con la obra seleccionada. Al certamen de este año se presentaron 114 obras procedentes de 20 países. Estellés recordó al uno d elos asesores de la bienal, el pintor y grabador Rafael Gómez Aranda, fallecido el 7 de octubre.
Tal como avanzó el martes Levante-EMV, el ganador de este año tenía cerrado desde hace meses un viaje a València desde Colombia, donde es profesor de la Universidad Nacional. Y ese viaje le ha hecho coincidir con el estreno de la muestra, de ahí que anoche pudo recoger personalmente el premio. Rincón, que ya estuvo en Xàtiva el lunes para firmar y numerar las 30 copias del grabado ganador que ha de entregar al consistorio, tal como establecen las bases, destacó «el prestigio enorme no sólo en España si no también fuera» de esta bienal. Y señaló una curiosidad: el pueblo colombiano de sus abuelos se llama Satiba Norte. La creencia popular cree que es influencia del nombre de Xàtiva, dijo.
El jurado de la XIV Bienal de Grabado, cuya primera edición fue en 1991, lo han formado, además de los representantes municipales, tres artistas plásticos de primer nivel, todos ellos especialistas en grabado: los académicos y grabadores Rafael Armengol y Antonio Tomás, y el catedrático de Serigrafía y también grabador Manuel Silvestre, quienes también tres menciones de honor: a las obras de Ximena Medina (España); Adam Czech (Polonia) y Fianni de Serio (Italia).
