La Diputació de València aportará los primeros 150.000 euros para la construcción de un paso inferior que salve las vías del tren en L'Alcúdia de Crespins, tal como ya avanzó este diario semanas atrás. Este convenio, aprobado en la Junta de Gobierno de esta semana, es una garantía para los vecinos de este municipio, que serán testigos de la puesta en marcha de esta obra a lo largo de 2018, evitando así la marginación de uno de sus barrios y facilitando la conexión entre los 18.000 habitantes que suman L'Alcúdia de Crespins y Canals. El presidente de la diputación, Jorge Rodríguez, ha manifestado que «el hecho de que 18.000 personas tengan un acceso sencillo y seguro es suficientemente importante para que la Diputació de València manifieste su voluntad de implicarse en esta solución; no podíamos olvidarnos de que disfruten de accesos seguros», añade Rodríguez, quien en su día recorrió la zona acompañado por el diputado Pablo Seguí.

Este acuerdo fue alcanzado el pasado mes de mayo tras un encuentro mantenido entre el presidente de la Diputación de València, Jorge Rodríguez, y el entonces alcalde de L'Alcúdia, Roberto Granero. Aquella visita sirvió para certificar el apoyo de la corporación provincial a la ejecución de la infraestructura, que supone la consecución de una reivindicación vecinal ante la supresión del actual paso a nivel y la construcción de una pasarela metálica elevada, según preveían, o «un muro que habría partido el pueblo en dos», según alertaron los contrarios a esta actuación tan lesiva para las comunicaciones del municipio.

«Para un pueblo como el nuestro, de cinco kilómetros cuadrados, tener que dar un rodeo de dos kilómetros para ir al centro urbano era una barbaridad», explica el ahora concejal Granero. El actual alcalde, Josep Garrigós (Compromís) se manifestó días atrás en términos parecidos. El primer edil está muy satisfecho del logro. Desde el ayuntamiento han destacado que esta actuación era una solución viable: «Hemos desmontado el argumentario de quienes decían que la obra no era posible por motivos técnicos. Ya solo nos quedaba asegurar su viabilidad económica, y con la aportación de los primeros 150.000 euros para la primera fase, a cargo del consistorio, y el compromiso de Adif para la segunda, el paso subterráneo para vehículos y peatones será una realidad en 2018», según la nota de la diputación, ayer.