El conseller de Economia Sostenible, Rafael Climent, aparcó ayer sin fecha la adopción de medidas para ayudar al Ayuntamiento de Vallada a salir del colapso financiero provocado por el fracaso de Valpark, el macroparque logístico y empresarial promovido durante la época del PP. Climent aseguró que para la administración autonómica «será muy difícil actuar» hasta que se cierren «todos los juicios pendientes» que arrastra el consistorio a raíz del proyecto. El conseller recordó que ha mantenido diversas reuniones con la alcaldesa de Vallada, Mª José Tortosa, e incidió en la importancia de que primero el ayuntamiento resuelva la maraña jurídica que impide el uso de los terrenos (más de 1 millón de metros cuadrado de suelo), una tarea en la que la corporación municipal ya se ha puesto manos a la obra con ayuda de la diputación. Climent admitió que «va a costar tiempo» revertir el bloqueo del parque porque el proceso es «complejo». El conseller mandó un recado al PP: «Uno ha de hacer cosas según sus posibilidades, porque si no amarga a sus vecinos durante muchos años», dijo, en relación a la deuda que asfixia a Vallada, de 25 millones de euros. Aún así, el titular de Economía señaló que se están estudiando fórmulas para terminar el polígono y facilitar la posterior comercialización de la bolsa de suelo sin uso.