Treinta años después del concierto de campanas que tuvo lugar en Ontinyent en 1988, el músico y compositor Llorenç Barber vuelve a dirigir una propuesta de este tipo en la capital de la Vall d'Albaida. Almaig, un concierto de campanas para la historia, basado en una partitura creada para la ocasión por Barber, tendrá lugar mañana sábado a partir de las siete de la tarde, y está organizado por el Ayuntamiento de Ontinyent con la colaboración de Culturart y la Colla de Campaners, grupo con amplia experiencia en conciertos de campanas en la ciudad, destacaron ayer desde el consistorio.
El concejal de Cultura, Alex Borrell, que presentaba ayer la cita junto al autor, tenía palabras de agradecimiento para Llorenç Barber, la directora artística Montserrat Palacios y la Colla de Campaners, «sin los cuales no se podría disfrutar de una propuesta tan atractiva y con tanta personalidad como ésta. Será un regalo de reyes espléndido poder escuchar este concierto en la que estarán involucrados cinco campanarios de la ciudad», señalaba ayer.
El concierto comenzará a las siete con la interpretación de una pieza de 55 minutos en la que participarán la iglesia de Santa María con once campanas y trebanelles (matracas); la Ermiteta con cuatro; San Miguel con tres; San Carlos con cinco; y Sant Francesc con cuatro más. Llorenç Barber explicaba que al ser un concierto plurifocal los espectadores deberán ir recorriendo la ciudad, ya que desde cada calle o barrio se escuchará de forma diferente. Barber incidía en que «este no es un concierto para sentarse sino que hay que pasear por la ciudad, porque ésta es el instrumento, no las campanas». El compositor también recordaba como hace 30 años se llevó a cabo por primera vez en Ontinyent este tipo de concierto, «que fue un atrevimiento en su momento y que tuvo mucha repercusión», manifestaba ayer el músico
Propuesta internacional
Aunque Barber es un investigador de primer nivel que ha centrado su faceta en la experimentación y en la música de vanguardia y las nuevas sonoridades, el gran público le relaciona de inmediato con los conciertos de campanas. Lleva tres décadas desarrollando este formato, que necesita de la complicidad local, sobre todo del clero, y que ha exportado a varios países, con hitos como su concierto de Roma en 1999 en el que participaron al unísono 64 iglesias de la capital italiana con motivo del anuncio del Jubileo del año 2000. Barber, que reside en Valencia, también fue protagonista de una polémica cuando un nuevo ejecutivo municipal liquidó el festival Nits d'Aielo i Art que el músico desarrollaba anualmente en su localidad. El certamen se trasladó a Valencia. En mayo del año pasado, Barber y Ontinyent unieron sus nombres también con motivo del concierto minimalista que éste dedicó en el Palau de la Música a un ontinyentino: José Melchor Gomis, autor del conocido Himno de Riego e ilustre personaje local al que se le dedicó un año de actividades.
