Derrota del Atzeneta en casa ante el Castellonense (0-1) o lo que es lo mismo, primeros puntos que cede el equipo taronja en su estadio en toda la temporada, ante un Castellonense que vivió de rentas con el autogol de Romero en la primera parte. Los de Roberto Granero gozaron de grandes ocasiones de gol para darle la vuelta al marcador pero les faltó acierto en los metros finales.

El partido de la jornada se disputaba en el Regit entre el líder de la categoría y el Castellonense. Los números daban favorito al Atzeneta, que hasta la fecha había saldado con victoria todos sus compromisos como local, pero el Castellonense se llevó los tres puntos en una jugada afortunada para sus intereses y no necesitó mucho más para conseguirlo. La consecución del gol, además de una jugada individual de Marcos Campos en el segundo acto, resume el bagaje ofensivo de los pupilos de Abel Buades a los que, con los tres puntos en el bolsillo, les permitió recortar distancias con el Atzeneta, que continua al frente de la clasificación.

Por su parte, el Atzeneta pudo ganar con facilidad, disfrutando de ocasiones claras para adjudicarse el partido, sobre todo, en la segunda parte con dos intervenciones de Cristian que no encontraron la red de Eric por muy poco. En los instantes finales del match, Kikín tuvo el empate en un remate a bocajarro que chocó con una extraordinaria respuesta del portero del Castellonense. El técnico del Atzeneta, Roberto Granero lamentaba la forma en la que se perdió. «Terminamos muy tristes con el resultado porque ha habido pocos equipos que han hecho tan poco para merecer la victoria. Fuimos muy superiores, todas las ocasiones de gol las generamos nosotros y solo se produjo un remate a puerta del Castellonense. Fue el partido más plácido que hemos tenido en defensa de lo que llevamos de temporada. Estaba escrito que teníamos que perder y así se dio. Nos faltó fortuna y un poco acierto en ataque».

Al Benigànim le bastaron 45 minutos en el Municipal para finiquitar con éxito el debut de José Carlos Mullor ante su gente. Todo ello, en una tarde donde las jugadas a balón parado fueron clave. A los 11 minutos, un saque de esquina acabó en las redes de Jordi Bou con autogol de su compañero Cañes. De nuevo desde el córner llegó el segundo tanto de los locales. Esta vez fue Fran Alfonso quien culminó un balón peinado por Salom. La sentencia vino en los últimos coletazos del primer acto en una buena combinación de los rojiblancos que resolvió Palau con un lanzamiento lejos del alcance del portero visitante. Tras el receso pertinente, José Carlos Mullor dio entrada a Corella y Baeza para ir conociendo mejor a sus mimbres. El dominio valldalbaidí continuó, pero con menos peligrosidad, permitiendo al Racing Algemesí ganar en protagonismo. Iván acortó distancias en el marcador cuando el partido languidecía.

El entrenador, José Carlos Mullor, se mostró contento con la primera parte de su equipo, no así con lo visto en la segunda. «En la primera parte empezó a verse el Benigànim que quiero; fuimos dueños del balón y ello nos permitió generar ocasiones. Además, funcionó la estrategia; dos de los tres goles vienen en jugadas a balón parado. En definitiva, una buena primera parte y una segunda, como le dije a los futbolistas, para hacérnoslo mirar porque cuando no somos nosotros, el equipo es bastante vulnerable».

Nueva derrota del Canals

El Canals sufrió una nueva derrota, ante el Tavernes de la Valldigna, que se impuso 3-0, una goleada que pudo ser aún mayor. Los de la Safor llevaron el peso de un partido en el que los visitantes aguantaron bien plantados en la primera parte. A los cuatro minutos de la segunda parte, el Tavernes marcaba el primer gol y el Canals se vino abajo con cada diana. La segunda, menos de diez minutos después, fue un gol en propia puerta de Raúl Guarner, en quien golpeó un disparo del local Estruch e introducía el balón en la portería visitantes. El Canals, que no pudo completar la convocatoria y que, además, veía como Edu Puchades se lesionaba en los primeros minutos, acusaba el cansancio y se derrumbaba con el tercer gol local, en el minuto 60. Los de la Safor tuvieron más ocasiones y les anularon dos goles, con lo que el resultado pudo ser aún más abultado para los locales.

Los de José Adrián Aroca, quien afrontaba el segundo partido en el banquillo canalense tras debutar con empate, encajan otra derrota, y siguen colistas con dos puntos, sin conocer aún la victoria en lo que va de temporada.