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El eje comercial del Mercat de Xàtiva acumula cerca de 60 locales vacíos

La exclusión del casco antiguo para albergar las oficinas de la diputación contrasta con el goteo de cierres

El eje comercial que se articula en torno a la plaza del Mercat de Xàtiva y un conjunto de 17 calles adyacentes acumula alrededor de 60 locales con la persiana bajada. La exclusión del casco antiguo del proceso abierto promovido la Diputación de València para encontrar una nueva ubicación a sus oficinas tributarias ha vuelto a sacar a la palestra las voces que alertan del éxodo comercial y la despoblación del centro histórico, como consecuencia de algunos males endémicos que el Ayuntamiento de Xàtiva lucha por revertir.

Solo en la travesía Botigues-Trobat, se localizan 9 bajos comerciales vacíos, algunos todavía con los letreros de los antiguos inquilinos en la fachada, como es el caso de la Joyería Pérez Micó. De forma paralela, en la calle Sant Francesc, de gran tradición comercial, se identifican otras 7 tiendas que han dejado de tener actividad. Uno de los últimos en trasladarse a otro emplazamiento ha sido Ivarte, un negocio de electrodomésticos. A tan solo unos metros, en Montcada, una parte de la superficie donde se asentaba el gran bazar Zailand continúa cogiendo polvo. En Canónigo Cebrián se cuentan 4 locales con la persiana bajada y en la plaza de la Bassa recientemente se ha quedado abandonado el espacioso local de TeleXàtiva, que se ha mudado a República Argentina. Más desolador todavía es el goteo de cierres en la travesía de las calles Pi y Matilde Ridocci, aledañas al Mercat, donde se registran 8 bajos sin actividad. En poco tiempo han bajado la persiana tiendas de una dilatada trayectoria como Calzados Blasco o Jardí Estefani.

En la propia plaza del Mercat subsisten otros 6 locales cerrados. El ultramarinos Ca Sisternes se vende junto con los pisos superiores en un portal inmobiliario. Al drama se suman 5 locales sin actividad más en la calle Vallés, 2 en Caldereria, 2 en Farjas, 3 en Mossén Urios yotros 2 en Noguera.

Cierto es que el concurso promovido por la diputación para localizar su nueva sede tributaria en la Costera exige como requisito indispensable un local comercial de entre 300 y 350 metros cuadrados, unas dimensiones que no abundan en el centro histórico. Pero desde Iniciativa per la Recuperación del Centre Histórico de Xàtiva (IRCH), subrayan que no solo existen espacios con esas características, sino que además hay otras alternativas, como habilitar uno de los múltiples inmuebles abandonados como un edificio multiusos. Desde la entidad consideran que ha faltado planificación y critican que no se haya incentivado de ninguna forma la llegada de este importante servicio, que hubieran servido de acicate para revitalizar el conjunto BIC y darle vida, dado el elevado flujo de usuarios y trabajadores que arrastra. Al mismo tiempo, la administración -dispuesta a pagar hasta 1.800 euros mensuales de alquiler- hubiera dado ejemplo en la recuperación de inmuebles vacíos. El colectivo cita ejemplos de edificios válidos para las dependencias, como la Posada de la Soledad, junto a la Casa Margallonero. Pero la urgencia y la poca publicidad de la convocatoria han jugado en contra del centro histórico.

Nueva ludoteca en Botigues

En todo caso, no todo es oscuro en el casco antiguo. En la calle Botigues acaba de abrirse la ludoteca «La Mona», que puede ayudar a revitalizar la zona. Enfrente, es inminente la apertura de la nueva oficina del Consorcio de Residuos. El consistorio activó en 2017 un plan de ayudas al alquiler para alentar el asentamiento de nuevos negocios en els Carrers del Mercat.

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