Cuando uno tiene dolor de muelas, aunque disimule e intente sonreír, se le nota y su rostro no transmite sensación de felicidad. El Olímpic es imposible que transmita un rostro de felicidad porque le duelen las muelas y algo más, pero al menos debería intentar disimular.
El dolor de muelas es la situación económica, la deuda acumulada, los requerimientos de las administraciones, los fichajes fallidos, que este miércoles fueran 150 los espectadores que asistieron a ver el partido?
Es verdad que se intenta desde las redes sociales animar a los aficionados, lanzar mensajes positivos; que deportivamente estamos muy vivos; que se invitó a los socios a asistir acompañados; que hubo rifa? pero no es suficiente.
No se puede poner buena cara pero tampoco empeorar las cosas. Este miércoles me llamó la atención que un equipo B y con tres juveniles no se pudiera completar la convocatoria. Eso denota falta de comunicación, de «cariño», de «cuidado». Me sorprende también que pasados ya unos días todavía no haya información oficial sobre la primera fase de adquisición de acciones. Eso solo hace que mermar la ilusión inicial y tener más dudas. Hasta un socio „aunque lo considero una anécdota„, me preguntó por qué no se ponen ya las banderas a la entrada del campo cuando hay partido.
Problemas todos, pero pese a ello, creo sinceramente que se deberían cuidar mejor algunos detalles, detalles que pueden ayudar a maquillar el rostro y aliviar el dolor de muelas que tiene el club.
Seguimos vivos, muy vivos ¡Cómo se nos ocurra ganar al Crevillent!
