El pleno de Bocairent ha aprobado por unanimidad una propuesta de rechazo al cierre del puesto de la Guardia Civil en la localidad, adelantado por Levante-EMV semanas atrás. En un extenso texto que respaldan todos los grupos políticos, el consistorio muestra su «disconformidad absoluta» con la medida «ya que perjudica a los vecinos de Bocaient, que para realizar cualquier trámite ordinario ahora se han de desplazar a Ontinyent», señalan.

El ayuntamiento también protesta por las formas, ya que la medida no consta oficialmente y nadie de la Guardia Civil la ha comunicado. Asimismo, el consistorio asegura que ha invertido 13.000 euros en las dependencias de la Benemérita ahora cerradas ya que son de titularidad municipal. Es más, recuerdan que en el año 2009 el ayuntamiento cedió al Ministerio del Interior un solar valorado en más de 340.000 euros para la construcción de un nuevo cuartel, operación acordada con la Gerencia de Infraestructuras y Equipamientos de la Seguridad del Estado. Pero, sobe todo, el consistorio se queja de que el traslado de los dos últimos agentes al cuartel de Ontinyent y el cierre del puesto de Bocairent «genera una situación de inseguridad entre los habitantes de Bocairent, que cuenta con un término municipal de 98 kilómetros cuadrados». Eso sí, la Guardia Civil les ha garantizado las misma labores de vigilancia que hasta ahora, según admiten.