A lo largo de sus treinta y tres años de funcionamiento, han sido muchos los anuncios que han planeado sobre el Palacio de Justicia de Xàtiva, un edificio del siglo XVII que se ha quedado obsoleto, con un volumen de actividad que no casa con el deterioro y la falta de adecuación de sus dependencias. Después de varias décadas a la espera de intervenciones que nunca llegan, la consellera de Justicia, Gabriela Bravo, se comprometió ayer a abordar «en el corto-medio plazo» la reforma integral que necesita la sede judicial de la plaza Trinitat para adaptarse a los nuevos tiempos de la administración.

En su visita al antiguo Palau de l´Alacó, Bravo avanzó que el partido de Xàtiva va a incorporarse al Plan de mejora de infraestructuras judiciales diseñado por la Generalitat. La consellera se reunió con el alcalde de Xàtiva y los técnicos del ayuntamiento para sentar las bases de un acuerdo de colaboración encaminado a desatascar la inversión —a la espera todavía de ser cuantificada— siguiendo el modelo del Pla Edificant, que deja en manos de la corporación municipal la elaboración de proyectos, la obtención de permisos y la dirección y licitación de las obras, con los fondos transferidos por la Generalitat. Con ello se pretende acelerar los trámites y sortear el bloqueo que sufre la administración autonómica. La actuación conjunta y coordinada permitirá, según Bravo, «que la reforma se pueda iniciar en esta legislatura», antes de junio de 2019.

La consellera recalcó que es «consciente» de la problemática del Palacio de Justicia de Xàtiva, un Bien de Interés Cultural (BIC) donde toda intervención ha de ser extremadamente respetuosa y ajustarse a las directrices marcadas por la Dirección General de Patrimonio. Entre las «múltiples deficiencias» que presenta el edificio, la titular de Justicia citó las carencias en materia de accesibilidad o los problemas de distribución interna que se registran en las salas de juicios y en las propias oficinas judiciales y que han de corregirse con urgencia. En los últimos años, los trabajadores también han denunciado el hacinamiento, las goteras y humedades, así como la mala climatización, el colapso de expedientes y los desperfectos en diversas estancias.

Bravo avanzó que, en el plazo de «un mes o mes y medio», podrían estar listos los estudios que definirán las actuaciones necesarias en los juzgados y la valoración económica de los trabajos, una vez completado el trabajo coordinado de los técnicos municipales y autonómicos para evaluar exhaustivamente la situación de las instalaciones y diseñar el proyecto de rehabilitación integral.

La consellera también mantuvo ayer un encuentro con los jueces y letrados que trabajan en la sede de la capital de la Costera para «escuchar sus necesidades» e inquietudes. Preguntada por las demandas de personal, Bravo dijo que el partido de Xàtiva es «de los más estables de la C. Valenciana» y «no ha sufrido los picos de incrementos de la carga de trabajo derivados de la cisis económica de otros partidos judiciales», si bien señaló que «se tienen que atender todas las peticiones en cuanto al aumento de personal». La consellera reconoció que le constaban «necesidades de refuerzos en el ámbito del registro civil», aunque apuntó que el funcionamiento de los juzgados mixtos «sigue siendo correcto».

Nueva oficina del delito

El alcalde de Xàtiva, Roger Cerdà, agradeció a Bravo su visita y se mostró «satisfecho» tras, la reunión que calificó de «muy productiva». Cerdà resaltó «la atención personalizada de la consellera a las demandas del ayuntamiento».

El Palau d´Alarcó fue adquirido por el consistorio de Xàtiva en 1981 y rehabilitado en 1983 para convertirse en sede judicial. La sede, que abarca a una población de 87.585 personas de 26 municipios, alberga las dependencias del Registro Civil, 4 juzgados de instrucción, el Colegio de Procuradores y la Clínica Médico-Forense.

En 2003, el Consell del PP anunció la construcción de un nuevo Palacio de Justicia en Xàtiva con una superficie de 8.300 m2 y un presupuesto de 9,6 millones, que iba a doblar la capacidad del actual. En 2008, el ayuntamiento presidido por Alfonso Rus cedió al gobierno autonómico unos terrenos en el sector Palasiet que terminaron siendo ocupado por las oficinas de la patronal Adexa. El proyecto quedó sepultado con la crisis. En 2015, Levante-EMV informó de los planes de la conselleria de reformar los actuales juzgados, si bien la actuación se ha retrasado por la prioridad de otras sedes.

La titular de Justicia aprovechó su visita para anunciar que, en la primera semana de junio, se pondrá en marcha la nueva oficina de atención a las víctimas del delito en Xàtiva, una vez adjudicadas las obras en la planta baja dirigidas a acondicionar espacios seguros y a que se puedan incorporar tanto los trabajadores sociales como los psicólogos asignados al servicio «en las condiciones de seguridad y privacidad necesarias».