El PAI que dio vida a la fantasmagórica urbanización del Misterio continúa ocasionando quebraderos de cabeza al Ayuntamiento de Xàtiva una década después de completarse las obras. La promotora del área residencial aislada (y apenas habitada) que se integra en el diseminado de Bixquert edificó el sector Foies en 2006 sin respetar el dominio público hidráulico y sin los permisos oportunos de la entidad competente, con la aquiescencia municipal. La Confederación Hidrográfica del Júcar (CHJ) se ha enfrentado a lo largo de los años en reiteradas ocasiones a la administración local por la anárquica usurpación del lecho fluvial que atraviesa la zona.
Las notificaciones del organismo de cuenca dependiente del Ministerio de Medio Ambiente han obligado al consistorio a diseñar un proyecto de intervención que va a desplegarse en breve para devolver a su estado original un barranco que fue parcialmente invadido por un parque ajardinado acondicionado con gravilla en el perímetro de la zona de chalés, al cual apenas se le da uso.
Para ahorrarse la multa con la que había sido amenazado, el ayuntamiento inició un expediente de actuación y va a sufragar las obras, valoradas en 27.000 euros, con los fondos de uno de los próximos planes provinciales de la diputación. El objetivo de los trabajos, según subraya la regidora Pilar Gimeno, es que las aguas pluviales vuelvan a estar correctamente canalizadas mediante una infraestructura similar a un colector que permitirá reponer la función de drenaje. Gimeno atribuye la problemática a las deficiencias con las que se materializó el PAI autorizado por el gobierno de Alfonso Rus prescindiendo de autorizaciones fluviales. La edil recalca la importancia de «conservar los barrancos naturales» por «su función de prevenir inundaciones y evitar destrozos» en caso de fuertes lluvias. La actuación, que ha recibido el visto bueno de la CHJ y ya está dotada presupuestariamente, contempla la alineación parcial del barranco, en cuya recuperación se utilizarán piedras y plantas drenantes que mitigarán el impacto ambiental de la obra. El jardín actual, en todo caso, quedará prácticamente suprimido.
Multa de hace diez años
En 2008, Levante-EMV informó de la multa de 30.051 euros que la CHJ interpuso al Ayuntamiento de Xàtiva y a la promotora del Mistero, como responsable subsidiaria, por haber entubado 170 metros de barranco en las inmediaciones en el marco de las obras de urbanización del sector Foies B, que se ejecutaron sin la autorización del organismo de cuenca pese a invadir el dominio público hidráulico, como denunció en 2006 la guardería fluvial.En 2013, la CHJ también exigió al consistorio que pusiera remedio a los vertidos de aguas fecales y residuales sobre el barranco donde ahora se va intervenir, procedentes del canal de saneamiento del área residencial del Mistero, que dispone de unos pozos de decantación.
En aquella ocasión, la corporación culpó a la constructora, a la que se le incautó la fianza depositada por los abundantes desperfectos con los que se saldó el programa urbanístico. Poner fin al descontrol en la gestión de las aguas residuales en Bixquert es otro objetivo municipal a abordar.
