Revestimientos con piedra concertada, careada y mortero; franjas verticales de esgrafiados; escudos; pináculos; arcos de medio punto con dovelas de piedra; columnas con capiteles,... La fachada del antiguo colegio Lluís Vives de Ontinyent y actual sede de la Universitat de València en la capital de la Vall d'Albaida atesora estos elementos arquitectónicos de interés que están siendo rehabilitados con las obras que la institución académica lleva a cabo para recuperar la fachada original de este edificio inaugurado en 1934. Un edificio que recuperará también el cromatismo original.

La rehabilitación, adjudicada a Fulton SA y Azuche 88 SL por 685.000 euros, comenzaron en diciembre pasado y estarán listas antes del próximo curso, según aseguraron desde la Universitat de València. Esta misma semana indicaban que entre junio y julio podría estar finalizado el trabajo.

El inmueble acapara elementos ornamentales, especialmente el edificio central „tiene un ala rectangular en un extremo„, que el deterioro y el paso de los años había ocultado. La actuación va a permitir rehabilitarlos, embellecerlos y sacarlos a la luz, recuperando además el cromatismo original. El edificio central acapara en su fachada principal varios tipos de revestimiento, como piedra concertada, careada y mortero. Incluye también franjas verticales de esgrafiados y escudos en las mismas, con remates de pináculos que han sido reconstruidos. La fachada principal del edificio central concentra, además, arcos de medio punto con dovelas de piedra y columnillas con capiteles en huecos de la fachada, que también se realzarán con la actuación. Por su parte, elementos impropios, como los restos de un antiguo depósito de agua y cerramientos de ladrillo, serán eliminados. La fachada posterior, que recae al patio del antiguo colegio, más austera y racionalista, también será rehabilitada. El edificio conserva una de las dos alas rectangulares „la ala sur„ que tenía el inmueble original de una sola planta y con cubierta inclinada a un agua con teja árabe.

Las obras contemplan también la retirada de algunos de los árboles situados frente a la fachada principal, por lo que la palmera existente se trasplantará en otro emplazamiento y el níspero será retirado. Las moreras, de menos altura, se mantendrán.

El ayuntamiento que preside Jorge Rodríguez ha adquirido las dos viviendas ubicadas junto al inmueble, que han sido derribadas y el espacio resultante será cedido a la UV para ampliar los terrenos universitarios y conformar una parcela de una manzana completa. Este espacio realzará la zona frontal del campus, recayente a la avenida Comte Torrefiel, junto a la fachada principal del antiguo colegio y actual sede universitaria que se está rehabilitando.

El Ayuntamiento de Ontinyent ha reconocido la singularidad y el valor del inmueble elevando hace un año a la máxima protección patrimonial el antiguo colegio Lluís Vives.

Valores educativos

El exrector de la UV, Esteban Morcillo, que bajo su mandato puso en marcha las obras, destacó en sus últimas visitas a Ontinyent antes de dejar el cargo la singularidad y el interés arquitectónico del antiguo colegio y actual sede del campus de Ontinyent. Morcillo también ha puesto de manifiesto en diversas ocasiones, que el Lluís Vives representa los valores educativos defendidos por la II República, los de una escuela pionera en la concepción pedagógica, con una educación pública, laica y mixta. No en vano, el centro se inauguró en los años 30 bajo el nombre de Grupo Escolar Joaquín Costa, político e intelectual ligado a la Institución Libre de Enseñanza. Después pasó a denominarse Lluís Vives, por el humanista, filósofo y pedagogo valenciano.