'Duchamp, Man Ray, Picabia', que se podrá ver desde mañana al 21 de septiembre y que ha sido coproducida por el Mnac y la Tate Modern, repasa los principales temas que exploraron estos tres artistas a lo largo de sus trayectorias vitales y creativas: las máquinas, la 'performance', el erotismo, el objeto artístico, el vidrio, el ajedrez, la luz y la transparencia.

Entre las piezas que se exponen en Barcelona figuran 'El gran vidrio' --que se presenta por primera vez en España-- y 'La fuente', más conocida como 'El urinario', de Duchamp; rayogramas y la plancha a la que Man Ray insertó unos clavos y llamó 'Cadeau', y 'Paroxismo del sufrimiento' e 'Hija nacida sin madre', de Picabia.

La comisaria de la exposición, Jennifer Mundy, aseguró hoy que la exposición no ha pretendido repasar la trayectoria de los artistas por separado, sino reflejar aquello que los une: "Eran grandes amigos". También pretende mostrar cómo la idea de uno de ellos influía en los otros dos, confrontando las obras en un mismo espacio y viendo "cómo se contaminaban unos a otros".

Duchamp y Picabia se conocieron en París en 1911 y pronto trabaron amistad al compartir la misma actitud irreverente y anarquista ante la vida y el arte. Cuatro años más tarde viajaron a Nueva York, donde conocieron a Man Ray, que también estaba buscando una forma personal de expresión. Los tres contribuyeron a crear el movimiento dadaísta de Nueva York y, posteriormente en París, manteniendo su amistad durante toda la vida.

Los tres artistas tuvieron una sólida relación con Cataluña, como es el caso de Duchamp, quien expuso por primera vez 'Desnudo bajando la escalera' por primera vez en Barcelona y pasó veranos en Cadaqués, y Picabia, que formó parte en la capital catalana de la colonia de artistas europeos que se instaló en Barcelona huyendo de la Primera Guerra Mundial.

Mundy resaltó que en la complicidad que se originó entre los tres artistas tuvo gran culpa la "generosidad" de carácter de Duchamp, poco preocupado por la competencia y el dinero, que como "padre" del arte conceptual no dudaba en ayudar a sus amigos, entre los que se encontraban Picabia y Man Ray. "La amistad es un rasgo poco común en el arte", aseguró la también jefa de Investigación de Colecciones de la Tate.

La exposición plantea algunas de las obras icónicas de los tres artistas, pero acompañadas de otras obras menos conocidas y materiales como cartas, catálogos, libros, objetos artísticos y fotografías que evidencian "el compañerismo" que residía entre ellos.

En la muestra del Mnac es habitual que obras de uno reflejen a alguno de los otros dos artistas. Se exponen fotografías de Man Ray en las que aparecen Picabia y Duchamp o retratos realizados por Picabia de los otros dos artistas, así como instantáneas que muestran su gusto por disfrazarse.

Paralelamente a la exposición, el Mnac organiza un ciclo de conferencias que arrancará el 14 de julio con 'Duchamp, Man Ray, Picabia: el encuentro de los amigos', de la catedrática de Historia del Arte de la Universidad de Barcelona (UB) Lourdes Cirlot, y 'Sobre la fotografía y el film', a cargo de la catedrática de Historia del Arte de la Universidad de Essex (Inglaterra), Dawn Ades.