Las peluquerías catalanas se enfrentan a la Sociedad General de Autores de España (SGAE), que reclama el pago de derechos de autor por poner la radio en sus establecimientos, y han iniciado una campaña en la que piden a los clientes que acudan con su propia música.

Centenares de peluquerías y centros de estética de la ciudad de Barcelona, Sabadell (Barcelona) y Lleida han colgado ya un cartel en el que aparece la imagen de una joven con unos discos de vinilo junto al lema: "A partir de ahora cuando vengas a la peluquería ... no olvides traerte la música de casa \u00A1\u00A1\u00A1Ah y todo original!!!".

El vicepresidente de la Federación Catalana de Peluquerías y Belleza (Fedcat), José María Figueras, ha explicado a Efe que los carteles empezaron a distribuirse entre los 2.500 establecimientos que pertenecen a esta organización poco antes de las pasadas fiestas de Navidad y ya son "centenares" los que se han adherido a la campaña.

La Sociedad General de Autores de España (SGAE) asegura que más de 200 asociaciones en España ya se acogen a un convenio sectorial con el que regular de mutuo acuerdo dicho pago y que está dispuesta "a dialogar con ésta o cualquier otra federación o agrupación que lo desee" para regular un pago que "no es un impuesto, sino una tarifa".

En principio, los establecimientos comerciales y de servicios no incluidos en el sector de hostelería de menos de 50 metros cuadrados han de pagar 6,45 euros al mes por la utilización del repertorio musical protegido por la entidad de gestión. La cifra se incrementa en función del tamaño del establecimiento.

La entidad de gestión recuerda que "el único que puede renunciar a esos derechos es el autor y nunca SGAE", al tiempo que reivindica que "el respeto por la propiedad intelectual es una apuesta permanente por la cultura sostenible".

Medio millón de usuarios como televisiones, radios y distintos establecimientos "entienden esa defensa de los derechos de autor y hacen pago a SGAE como intermediario de los autores", apunta la entidad.

La sociedad de gestión asegura "no obligar a nadie a usar" el repertorio musical que se encuentra bajo su protección y que supone más de 5,5 millones de títulos en España.

Figueras asegura que "la situación es alucinante. Las peluquerías no viven de la música, simplemente intentan garantizar en sus salones un ambiente tan hospitalario como si nuestros clientes fueran invitados en nuestros propios hogares".

El portavoz de la Fedcat se pregunta si los peluqueros podrían, a su vez, plantearse la posibilidad de que sus clientes que aparezcan en actos públicos deban pagarles un canon por el uso público de sus peinados.

La Fedcat considera el canon de la SGAE "injusto" y acusa a este organismo de moverse sólo por intereses "recaudatorios".

La Federación Catalana de Peluquerías y Belleza, creada en 1997, agrupa a empresarios de peluquería y estética de toda Cataluña.

La de los peluqueros catalanes no es la primera acción en contra de este cobro. La Asociación de Empresarios de Montijo y Comarca (Ademyc) solicitaron a finales de 2009 una lista de los socios que componen SGAE para entregar a sus miembros, y que de este modo puedan elegir entre usar o no melodías que estén sujetas a esas tarifas de protección de derechos de autor.