Llega a la cita más que puntual. Y sin apariencia de diva. Tejanos, una chaqueta deportivaÉ Perfectamente maquillada, eso sí. Sabe que hay fotos. Nino Machaidze (Tblisi, Georgia, 1983) ha irrumpido con fuerza en el circuito de la ópera. Su voz y su imagen -alguien la llamó la "Angelina Jolie de la ópera"- han atraído la atención. En Valencia interpreta uno de los papeles más exigentes, con algunas de las notas más agudas del belcanto. Uno sólo advierte cierto reproche si se le insinúa si es la "nueva Anna Netrebko".

¿En qué piensa cuando tras representar la locura de Lucia, el público irrumpe en aplausos durante unos minutos?

Soy sólo muy feliz, porque lo que hacemos es para el público y los aplausos demuestran que les ha gustado. Si puedo emocionar es que he conseguido mi objetivo.

¿Es felicidad también por superar el reto del momento técnicamente más complicado?

No, porque la ópera es un continuo, no hay un punto que tengas que hacer mejor, es de la primera a la última nota.

¿Qué representa el personaje de Lucia para una soprano?

Es un papel muy importante, muy difícil de cantar e interpretar, como todos los personajes que enloquecen. Creo que es de los más difíciles del belcanto y de toda la historia de la ópera.

¿Que le pongan la etiqueta de "nueva diva" es mucha presión para una cantante joven?

No, es bello, me gusta [dice en español y ríe]. No me molesta, es algo que se dice y que la gente comenta, pero presión, no.

¿Y la comparación con las grandes, como la Callas o más recientemente Anna Netrebko, cómo la lleva?

Me parecen bien las comparaciones. En este mundo de la ópera siempre las hay, todo se compara. Lo importante es que la comparación sea positiva. Lo que no me gusta es que digan que soy "la nueva...", porque yo soy Nino Machaidze, siempre lo he sido, no la nueva nadie, porque no es verdad. Uno es uno mismo.

Da la impresión de que tiene claro que para la ópera no es necesario sólo cantar bien, sino también actuarÉ

Sí, la interpretación es muy importante, en Lucia sobre todo, pero también en otros papeles del belcanto. Si Lucia sólo se canta, el papel se queda vacío, plano. En la ópera lo más importante es la voz, pero el teatro es un conjunto y hay que saber actuar. Además es algo natural; si tú escuchas la letra que estás cantando, representar esas palabras sale de manera automática.

¿Piensa también que no es necesario llegar a las notas más altas para ser una buena cantante?

Absolutamente de acuerdo, porque la ópera no son sólo una o dos notas, sino tres horas de música y hay que hacer bien la ópera completa.

Hay cierto desprestigio del belcanto dentro del mundo de la ópera, ¿qué replica?

No estoy de acuerdo. El belcanto es algo muy bonito y muy difícil, que no todos los cantantes pueden hacer. No se puede decir sólo Verdi o Puccini. Están muy bien, pero el belcanto es espléndido. La escena de la locura de Lucia o el aria final de Edgardo son extraordinarias. Es algo muy completo; hace falta agilidad, tener una voz grande y entonación.

¿La imagen es fundamental hoy en día para abrirse camino?

Hoy es importante estar en forma, ser ágil para poder moverse en el escenario, pero la ópera se llama así por la voz, que es lo más importante. Si eres guapa claro que te ayuda, pero no es lo más importante.

¿Y el "glamour", la imagen social, estar en prensa y fiestas, es también importante?

Si sales en televisión y prensa, aumenta un poco tu nombre y te das más a conocer, pero día tras día has de demostrar cantando que realmente vales. Te haces más famoso, pero una cosa es el amor y otra, el trabajo.

¿Hubiera llegado al mismo sitio si fuera menos agraciada físicamente?

Espero que sí. Tengo mi voz y mi personalidad en el escenario, pongo todo mi corazón para demostrar al público que doy lo máximo, así que creo que sí que hubiera llegado igualmente.

¿Considera una una falta de respeto eso de "la Angelina Jolie de la ópera"?

No, es una mujer muy bella. Me lo tomo como un cumplido.

¿Sus objetivos se centran en la ópera o está abierta a otras propuestas artísticas?

La ópera es todo para mí. No podría vivir sin cantar y sin estar sobre un escenario, pero depende de cómo vayan las cosas. El cine, tal vez, sería una posibilidad, pero siempre relacionado con la ópera.

¿Le interesa la política?

La política no me gusta y no me interesa nada. Hay otras cosas mucho más bonitas por las que preocuparse.

¿Pero está implicada con su país, Georgia, o se mantiene alejada de su realidad y sus conflictos vecinales?

Sí que estoy informada de lo que pasa, porque mi familia vive allí y todos los días hablo con ellos. Estoy muy preocupada, porque allí la situación siempre es complicada. Ahora está más tranquila, pero es un país siempre en una situación de combate y no es fácil vivir allí. Es una pena porque es un país precioso. Ahora están yendo más turistas y se está empezando a revalorizar.