?
Entre aplausos en un Teatro Olympia abarrotado. Así recibió ayer a Raimon el público valenciano en un recital que cerró el homenaje organizado por la Universitat de València tras entregarle su medalla de oro hace unas semanas. El cantautor quiso manifestar su alegría y nerviosismo por actuar de nuevo en la ciudad e inició su concierto con Entre la nota i el so, haciendo gala de su característica voz.
"Cuando canto en Valencia y en Xàtiva son los lugares donde más nervioso me pongo", confesó antes de empezar a desgranar los temas del concierto. "Este ha sido un año muy emocionante para mí por los homenajes que me han dado", agradeció.
Raimon prescindió de su guitarra al inicio del espectáculo, en el que estuvo acompañado en el escenario por cuatro músicos (Miquel Blasco y Joan Urpinell en la guitarra, Pau Domènech en el clarinete y Fernando Serena en el contrabajo).
En la platea pudieron verse algunas caras conocidas del mundo universitario y cultural. Entre elos, el rector de la Universitat, Francisco Tomás, y los cuatro candidatos a quitarle el puesto: Antoni Furió, Maria Antonia García Benau, Esteban Morcillo y Vicent Soler. También el delegado del Gobierno, Ricardo Peralta, el escritor Joan Francesc Mira y el entrenador de baloncesto Isma Cantó.
Raimon ya actuó en la Universidad Politécnica el pasado mes de mayo, pero el recital de anoche fue especial, ya que hacía diez años que el trovador no se presentaba ante su público en un recinto de estas características en la ciudad de Valencia.
Como contrapunto a la emotiva actuación, la presencia de un pequeño grupo de radicales del Grup d'Acció Valencianista (GAV), que increpó a los asistentes con gritos y consignas como Soc valencià, mai català. Dos camiones de la Policía Nacional vigilaron en todo momento que la protesta no pasara a mayores.
El concierto, en el que cantautor de Xàtiva recorrió sus 50 años de carrera, se prolongaba al cierre de esta edición. Clásicos como Al vent, Jo vinc d'un silenci y Diguem no estaban en la lista de canciones a interpretar.
