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Los trabajadores del equipo técnico del Palau de les Arts paralizaron el ensayo de La Traviata, el pasado miércoles por la tarde, para protestar por el incumplimiento de las condiciones pactadas con la dirección del coliseo en la negociación del convenio colectivo. Entre otros asuntos, "se acordó reestructurar las catorce pagas e incrementar el sueldo. Pero se han reestructurado las pagas y no se nos ha pagado este incremento", según explica uno de los trabajadores afectados.

Los técnicos del turno de la mañana secundaron la protesta de sus compañeros y se concentraron en silencio y de forma pacífica ante las taquillas del Palau desde las 10 a las 14 horas del jueves.

Los trabajadores lamentan que la dirección del Palau de les Arts haya decidido unilateralmente incumplir las obligaciones pactadas en el Tribunal de Arbitraje Laboral (TAL). "Se hacen las cosas a la valenciana o a lo l'Oreal: porque yo lo valgo...", critican.

Los técnicos que han protagonizado las protestas se encargan del montaje del escenario, de las luces o de la compleja maquinaria que garantiza la escenografía de las óperas que se representan en el Palau de les Arts.

"La empresa no afronta seria y responsablemente las peticiones que plasmamos en nuestras propuestas, tanto en materia de organización y planificación de la actividad, así como en su previsión", aseguran los afectados.

Hasta el momento el personal técnico, "pese a la mala racionalización del trabajo por parte de la Fundación, hemos sido capaces de ofrecer al público espectáculos de calidad, haciendo frente a situaciones realmente complicadas. ¿Pretenden suplir con nuestro esfuerzo, las carencias y la total falta de planificación en la organización diaria del teatro?"

Situaciones complicadas

Un ejemplo de estas situaciones complicadas es la programación de "una audición de 30 cantantes a una hora determinada, en la que apenas se deja a los técnicos treinta minutos de margen para adecuar el escenario a la programación de la tarde. Una auténtica locura".

De esta manera, "se pretende afrontar mediante criterios empresariales salvajes un deterioro en el ordenamiento y previsión de nuestra actividad, mientras otros teatros similares afrontan sus temporadas a dos años vista", lamentan. El Palau de les Arts, con cuatro salas, cuenta con 120 técnicos (distribuidos en dos turnos) cuando en coliseos como el de Barcelona son "dos tercios más".

Este periódico intentó ayer recabar la opinión del Palau de les Arts, sin éxito.