El largometraje polaco Galerianki, de Kasia Roslaniec, y el corto español Rumbo a peor, de Alex Brendemühl, resultaron ayer los ganadores de la Luna de Valencia de la XXV edición del Festival Internacional Cinema Jove, anoche se clausuró en la ciudad de Valencia.
Galieranki narra la vida de Alicia, una joven de 14 años, que cambia de colegio a mitad de curso. Se siente sola y un día una compañera le propone dar una vuelta por el centro comercial y observar a la gente elegante. Pero este filme, en palabras de la actriz y miembro del Jurado Hilda Peter, "no es sólo una historia adolescente" sino que cuenta "cómo nos encontramos a nosotros mismos, toca directamente a los sentimientos", recalcó.
La guionista y directora de la cinta, Kasia Roslaniec, recibió anoche la Luna de Valencia, valorada en 30.000 euros, en la gala de clausura que presentó María Almudéber.
La actriz andaluza y miembro del jurado Ana Álvarez declaró que la decisión del Jurado fue "muy difícil" ya que durante las deliberaciones se encontraron con "un empate absoluto" entre el largometraje de producción polaca y el danés puesto que un miembro del Jurado, la directora alemana Ina Weisse, no pudo asistir y tuvo que ser sustituido por otro experto que rompiera la igualdad de los cuatro jueces.
Sobre la ausencia de producciones españolas en la Sección Oficial de Largometrajes, la protagonista de La madre muerta destacó la participación en el festival de "películas buenas vengan de donde vengan". "El lenguaje del cine es universal", sentenció.
Igualmente, Cinema Jove otorgó una Mención Especial a la película danesa Submarino, dirigida por Thomas Vintenberg, que cuenta la historia de dos hermanos cuya infancia se vio marcada por la pobreza, los abusos y el alcoholismo de su madre, hasta que una tragedia desgarró a la familia. El hermano mayor acaba de salir de la cárcel y su objetivo es entrenarse a fondo y beber.
Por lo que respecta a la Sección Oficial de Cortometrajes, la española Rumbo a peor cuenta la historia de dos hombres vestidos de futbolista que deambulan por la naturaleza y, en su extravío, se encuentran con una mujer en la carretera. Abrumados por su belleza insisten para que se vaya con ellos en lo que será el principio de algo o de nada.
Los miembros del jurado de cortos, Ángeles Maeso, la directora italiana Stella di Tocco y el periodista checo Michal Prochazka, otorgaron el Premio Especial del Jurado a la alemana Hunger de Carolina Hellsgard, que narra las aventuras de dos hermanos que descubren un mundo exótico al entrar en un apartamento abandonado por inmigrantes.
También se distinguió al guión Nadie tiene la culpa, dirigido por Esteban Crespo, como Premio de Proyecto Cinema Jove, cuyo galardón supone financiar la realización del guión.; así como a Vuk Jevremovic, que fue elegido ganador del Premio Sonofilm al mejor director de cortometraje de producción española con Paciencia de la Memoria.
El Premio Pecera Estudio al Cortometraje Español con mejor sonido fue a parar a Marc Riba y Anna Solanas con Les bessones del carrer de Ponent, mientras el Premio Canal+ al Mejor Cortometraje, consistente en la compra de los derechos para su emisión en Europa, se lo llevó el corto francés Madagascar, carnet de voyage, dirigido por Bastien Dubois.
