La multinacional Heineken ha decidido dejar de patrocinar al Festival Internacional de Benicàssim (FIB) tras diez años de "exitosa relación", según confirmaron ayer las direcciones del certamen y de la empresa cervecera a través de sendos comunicados. Con esta decisión el FIB recupera asimismo el nombre que le vio nacer en 1995, subrayó ayer la organización. Dio a entender con ello que no hay voluntad de buscar un nuevo patrocinador que dé nombre al certamen. En los últimos años, la denominación oficial ha sido FIB Heineken, aunque popularmente ha prevalecido la marca del festival sobre la de la multinacional cervecera.

En 2006 tuvo lugar la última firma de renovación del contrato que unía a la marca holandesa con el festival de música más multitudinario del verano español, que contemplaba tres años más de patrocinio, que han vencido ahora y que no tendrán continuidad.

"Desde Maraworld -empresa organizadora del FIB- queremos agradecer a Heineken España, y a los diferentes equipos que han comprendido sus departamentos de marketing a lo largo de estos años, la confianza depositada en nuestra iniciativa, ayudándonos a desarrollar nuestra manera de entender la música en directo", señala el comunicado del FIB.

Por su parte, la dirección de Heineken España aseguró ayer haber decidido, "tras un balance de diez años muy positivos, dejar de ser el patrocinador principal del FIB". A pesar de esta decisión, la empresa seguirá trabajando "en nuevos retos como activador del panorama musical en colaboración con el sector" de la música en directo en España y reafirma su compromiso de seguir "liderando" citas como el Día de la Música Heineken, el proyecto Heineken Greenspace en varias ciudades o el festival internacional Jazzlandia.

Oferta para los más fieles

Por otra parte, Maraworld confirmó ayer que la decimoséptima edición del festival de Benicàssim tendrá lugar entre los días 14 y 17 de julio de 2011, cuyas entradas saldrán a la venta "en los próximos días" con una oferta especial para los fibers más fieles.

La última edición del FIB, que tuvo como principales reclamos a Gorillaz, Prodigy, Kasabian y Vampire Weekend, reunió entre los pasados 15 y 18 de julio a unas 127.000 personas, cerca de 73.000 menos que en 2009.

El nuevo director desde la última edición, el promotor británico Vince Power, achacó esta caída de asistencia a la crisis económica y al elevado gasto de contratación de grupos, que se ha reflejado en un incremento del precio de las entradas.

La decisión de Heineken se une de esta manera a la pérdida de afluencia y a la aparición de competencia directa en el entorno, con el aterrizaje este año en Burriana del festival Arenal Sound, con ambiciones similares al clásico de Benicàssim. El panorama se antoja así complejo para el nuevo FIB en manos de los promotores británicos. No obstante, la edición del verano de 2011 parece asegurada.