La nueva hipótesis lanzada por la investigadora del CSIC María Teresa Ferrer durante el Congreso dedicado al Tirant sobre la idea de que la novela de caballerías y celos, Curial e Güelfa, hubiera sido escrita por el bibliotecario y secretario de Alfons el Magnànim Lluís Sescases no ha hecho sino reabrir un debate que no consigue poner de acuerdo a los especialistas.

Ayer, por ejemplo, el Catedrático de Filología Catalana de la Universitat de València, Antoni Ferrando, autor del último estudio lingüístico sobre la obra aseguraba que "difícilmente" podría ser Sescases el autor ya que debido a su origen gerundense solía utilizar palabras como "abombollat, mangra, certament, mirall, capgros, encomanar, guilla, febre, oreneta o escurçar, por ejemplo, y en el Curial aparecen sus sinónimos abambollat, almánguena, ausades, espill, cullereta, (a)pegar, rabosa, febra, oronella o acurtar, respectivamente, tal como los valencianos ya preferíamos en el siglo XV y preferimos hoy".

Asimismo, con respeto al segundo nombre que barajaba Ferrer, el del comerciante de Morella Gabriel Cardona, Ferrando también lo considera difícil ya que era un mercader dedicado intensamente al comercio textil entre Valencia-Barcelona y Nápoles-Sicilia. "Ciertamente con misiones encargadas por el Magnánim, pero sin la enorme cultura literaria clásica, francesa, italiana,provenzal,catalanovalenciana y castellanoaragonesa que revela el Curial, sin el margen de tiempo suficiente para conocerla en profundidad a la vista de sus ocupaciones y sin un mínimo aval documental que nos pudiera confirmar su vocación literaria y un sólido conocimiento de la cultura italiana".

Para Ferrando, sin embargo, cualquier nueva aportación no hace sino aproximar un retrato robot en torno al autor de la más importante novela de caballerías valenciana del XV junto al Tirant y que continúa siendo motivo de estudio.

Ayer, en el congreso, el Catedrático de Historia Medieval Albert Hauf volvía a girar sobre su creencia de que la cuarta parte del Tirant fue escrita por su editor Martín Joan de Galba. "Martorell empeñó el libro a un noble, Martín Joan de Galba, que fue quien editó la novela a los 25 años de la muerte del autor", insistió el investigador.

En su opinión, el Tirant, "es una obra abierta y ambigua. Una novela muy atrevida sexualmente y anti-Islam, que incluye un sermón que si fuera publicado ahora podría provocar una guerra", añadió.

Por su parte, Ana Maria Babbi, profesora de filología románica en Verona, destacó que en la Europa del siglo XV hubo una interferencia continua entre los textos de todos los países.