La Cova Foradà de Oliva ha dado este verano su mejor fruto paleontológico: el hallazgo de medio esqueleto de un mismo hombre de Neandertal, lo que supone la conexión anatómica más completa encontrada en la Península Ibérica. En concreto, se ha localizado un cráneo unido a una columna vertebral, con costillas y vértebras que llegan hasta la región sacra. Ha aparecido además un trozo de húmero y un peroné que podrían ser del mismo individuo. Los huesos han sido datados, a falta de una concreción mayor, como de más de 40.000 años, en el Paleolítico Medio.

Un hallazgo "excepcional", coincidieron ayer los responsables de la investigación y los altos cargos de la Diputación de Valencia y la Generalitat, al presentar el descubrimiento. Estuvo presente también la profesora de Biología Humana de la Universitat Autònoma de Barcelona (UAB) Eulàlia Subirà, que será la encargada de realizar el estudio antropológico de los huesos, una vez sean liberados de los sedimentos a los que están adheridos.

Los expertos dan por seguro que no se trata de un enterramiento. Lo más probable es que el hombre fuera asesinado por un congénere y las hienas lo trasladaran después a su refugio en el interior de la cueva. La pieza de sílex hallada junto a una vértebra en posición vertical es la clave para esta interpretación, al igual que la abundancia de excrementos de la citada especie animal.

El hallazgo se produjo el pasado 9 de agosto, durante una campaña más en la Cova Foradà, donde se lleva investigando desde 1977. En 2000 ya apareció en esta zona de la cueva (parte trasera) un maxilar y un fragmento de cráneo. Algunos expertos del equipo investigador se decantan por la idea de los restos pertenecen al mismo sujeto. Es el caso de la profesora Subirà, pero no hay unanimidad en este punto.

Por lo pronto, el esqueleto ha sido extraído en bloque de la cueva -junto con todos los sedimentos adheridos, que pesan cien kilos, tal como se puede ver en la fotografía- y trasladado a las instalaciones de la diputación. Será sometido a un TAC en la UAB para ver el estado de los huesos antes de poder empezar la investigación más completa y la posterior restauración, que tendrá lugar en Tarragona, a manos de una especialista de la Universitat Rovira i Virgili. Terminado el largo proceso, los restos irán al Museo de Prehistoria de Valencia, dependiente de la diputación.

Los responsables del equipo investigador defendieron ayer el valor del hallazgo por ser "la más completa conexión anatómica" descubierta en España hasta el momento. En la cueva de las Palomas (Murcia), en la del Sidrón (Asturias) o en la Cova Negra (Xàtiva) han aparecido huesos de más individuos, pero nunca un esqueleto tan íntegro.

El hallazgo sirve además para dar más valor a la Cova Foradà de Oliva, en la que se cree que puede haber restos hasta del Paleolítico Inferior.