Incunables, manuscritos y libros únicos forman la biblioteca privada del Ateneo Mercantil de Valencia. De entre toda su colección, un total de 52.000 volúmenes, 50 obras han sido las escogidas para la muestra 50 joyas bibliográficas. La gran mayoría son ejemplares "únicos o muy raros" en España y que nunca han sido estudiados, describió ayer el comisario de la exposición durante su presentación, Rafael Solaz.
La muestra estará abierta al público hasta el 30 de septiembre "para que todos los visitantes reconozcan los libros que dan el derecho y privilegio de ser valencianos", explicó el presidente de la entidad José Manuel Botella.
El comisario comentó que, al igual que el protagonista de El nombre de la rosa que no sabe que libro salvar del incendio de la biblioteca, él estaba indeciso a la hora de escoger tan solo 50 obras, ya que se trata de piezas "de importancia vital para la cultura valenciana, de España y casi mundial".
De entre toda la colección destacan los dos ejemplares impresos antes del 1500. El Ateneo posee un incunable sobre la filosofía de Aristóteles (1493) , y otro sobre los sermones de Sant Vicent Ferrer (1499). Solaz también señaló una serie de documentos manuscritos sobre el Monasterio de la Zaydia, "el gran desconocido", porque suponen una fuente de estudio para "la vida social y religiosa del siglo XVI".
En la muestra se incluyen escritos de todo tipo. Existen varios ejemplares sobre los Furs, sobre temas sociales como las escrituras de una casa de Moncada (1603), fragmentos de obras de comedia que muestran como era el teatro escolar del siglo XVI, u obras de ciencia como un libro de anatomía sobre la historia de la composición del cuerpo humano de Joan Valverde (1556).
El valor de la muestra es incalculable. Solaz explicó que es imposible poner precio a manuscritos y ejemplares únicos, pero se atrevió a valorar el libro de Antonio Cavanilles sobre agricultura, comercio y costumbres valencianas (1795), en 15.000 euros. Además, comentó que las obras que conforman la muestra van desde finales del siglo XV hasta principio del XIX y están escritas en su gran mayoría en valenciano, castellano y latín. El comisario señaló que en un futuro, el Ateneo podría organizar exposiciones temáticas.
