El Museo Nacional de Cerámica y Artes Suntuarias González Martí ha descubierto entre sus fondos cuatro bocetos inéditos del pintor y tratadista cordobés Antonio Palomino de Castro y Velasco (1655-1726), que además sirvieron de base a su colega valenciano Dionisio Vidal para realizar los frescos de la bóveda de la iglesia de San Nicolás de Bari de Valencia.

Los dibujos, hallados entre los fondos sin catalogar del museo valenciano gracias al trabajo del entonces becario por el Ministerio de Cultura Víctor Marco, se exhiben ahora por primera vez junto al tratado 'El museo pictórico y escala óptica' que escribió el propio artista y que la Biblioteca Nacional de España (BNE) acerca ahora a los valencianos para que la teoría dialogue con la práctica de sus obras.

La muestra se completa con la impresionante escultura la 'Carroza de las ninfas' de Hipólito Rovira, curiosamente, diseñador de la portada de libro de Palomino. Forma parte de segunda fase de la gira que la BNE realiza por todo el país con motivo de su tricentenario en busca de 'Otras miradas', que da título a la exposición. Al igual que en este caso, la idea es llevar algunas de sus obras por museos o instituciones del territorio nacional para que dialoguen con las piezas que se albergan en ellos.

Para el González Martí se escogió 'El museo pictórico y escala óptica' y se da la "feliz coincidencia" que coinciden con el hallazgo de cuatro bocetos del mismo autor, ha destacado este martes la directora de la BNE, Glòria Pérez-Salmerón, durante la presentación de la exhibición junto a la directora de la directora general de Acción Cultural Española, Elvira Marco, --que patrocina la iniciativa--, el director del museo, Jaume Coll, y el doctor en Historia del Arte, Víctor Marco, en su momento becario del ministerio que descubrió los bocetos.

En este sentido, Coll ha querido manifestar que el museo está haciendo un "intenso trabajo de catalogación" de los fondos de que dispone. En poco tiempo ha logrado archivar 26.000, pero son miles y miles los que quedan por estudiar. "Todavía quedan cosas por descubrir", ha animado.

Al respecto, Víctor Marco ha explicado que los dibujos fueron realizados en Madrid por Palomino en una fecha cercana a 1692 para que el también pintor valenciano y discípulo de la Corte, Dionisio Vidal, realizara el conjunto de pinturas al fresco de la iglesia de San Nicolás de Bari y San Pedro Mártir de Verona en la capital del Turia, "de los más importantes en la España del Barroco".

Según ha dicho, Vidal quería que Palomino colaborara con él en los frescos, pero éste solo accedió a hacerle los bocetos, que después su colega reproduciría "fielmente". Sería más tarde cuando Palomino ya vino a trabajar en algunos edificios valencianos como la iglesia de los Santos Juanes, la Basílica de los Desamparados o la Catedral.

En la bóveda de la iglesia de San Nicolás de Bari, la estructura de cada medio tramo sigue un modelo que se repite: una escena de cada uno de los santos ocupa el centro de los lunetos, siendo los del lado de la epístola los dedicados a San Pedro de Verona y los del lado del evangelio a San Nicolás de Bari.

Estos lunetos están a su vez flanqueados por una pareja de figuras alegóricas, cuyo significado hace referencia al hecho representado en la escena principal que acompañan. El espacio superior de cada luneto queda reservado a la representación de cada una de las diferentes categorías angélicas.

"REVOLUCIÓN SIN PRECEDENTES, BARROCO EXULTANTE"

Tanto en la teoría como en la práctica Palomino fue "máximo exponente de la pintura barroca triunfal, colorista, exultante y en movimiento" que rompió con la tradición anterior marcada por el tenebrismo y el juego de luces y sombras, para "influir" en los que vendrían detrás, a lo largo del siglo XVIII y XIX.

De hecho, supuso una "revolución sin precedentes en la historia de la pintura valenciana, revolucionó conceptos estéticos dejando huella" y sus sobras serían "símbolo de las relaciones artísticas entre Madrid y Valencia a finales del siglo XVII", ha resaltado Marco.

Tanto es así, que el profesor prevé realizar una exposición sobre el artista en la Luz de las Imágenes que viaje por toda la comarca del Maestrazgo el año que viene y que incluya estas mismas piezas, junto a una investigación y un contexto más profundo sobre su obra y la historia de la pintura valenciana.